El gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, tuvo contactos con barras de Boca y River, que se comprometieron a que no va a haber enfrentamientos en el superclásico del miércoles. “Los barras se han comunicado con el gobernador de la provincia.

Vienen a alentar”, reveló Marina Capitanich, prima del mandatario provincial, quien la designó para la organización del partido.

Asimismo, dejó entrever cierto temor respecto de choques de facciones antagónicas de cada uno de los clubes. “El problema no es Boca contra River, sino las internas que tienen entre ellos”, resaltó a dirigente, la mano derecha del gobernador Capitanich en el club Sarmiento, del cual es el presidente. Es en esa cancha, inaugurada el año pasado, donde se jugará el primer superclásico desde que River se encuentra en la B Nacional.

La admisión de contactos entre el mandatario provincial y barras se da en medio de un reflotado debate en cuanto a los vínculos de esos sectores con dirigentes de clubes y políticos, tras el asesinato de un integrante de la barra de Chicago. La dirigente chaqueña aseguró, por otra parte, que los barras “no han pedido entradas sin cargo” sino que “todos vienen con entradas adquiridas”. También aclaró enfáticamente que “fueron ellos los que se comunicaron con nosotros. Igual, es importante”.

Los barras de Boca y River irán por rutas diferentes. Los de Boca lo harán por la ruta 11, en tanto que los de River viajarán por la ruta 14. Las dos parcialidades llegarán al estadio también por distintos caminos.