Boca Juniors se clasificó a las semifinales de la Copa Libertadores, en las que enfrentará a Palmeiras, de Brasil, al vencer anoche en Avellaneda a Racing Club por 4 a 1 en definición por penales, instancia en la que el arquero Sergio "Chiquito" Romero atajó dos para desempatar el 0 a 0 y el anterior en la Bombonera.

De esta manera, Boca, sin ganar ninguno de los cuatro partidos de play offs, ya que con Nacional igualó también 0-0 de visitante y 2-2 de local en octavos, enfrentará a fines de septiembre a Palmeiras.

Racing salió convencido a buscar el gol desde el inicio del partido y a ser protagonista, todo lo contrario a lo que hizo durante la primera etapa en el partido de la ida. Con el dominio absoluto del mediocampo y con el equipo parado en zona rival, la "Academia" fue el quien impuso las condiciones del juego con un correcto manejo de la pelota.

Así terminó. La misma serie de penales. Rojo acaba de marcar el cuarto gol de Boca y sus compañeros salen disparados para festejar. En el juego fue otra vez 0-0 con Racing y la serie se definió en los penales.

Boca, por su parte, trató de no desesperarse, se paró firme en defensa y no se animó a arriesgar en ofensiva.

Ya en el complemento de a poco la visita tomó confianza, emparejó el mediocampo, aunque por momentos el trámite del encuentro se tornó impreciso y friccionado en dicha zona.

Con el correr de los minutos Boca copó el mediocampo, lo dominó y por momentos se acercó al arco defendido por Gabriel Arias aunque sin peligro certero.

Los de Gago perdieron peso ofensivo, nuevamente con un flojo desempeño del centrodelantero Maxi Romero, que faltando diez minutos fue reemplazado por el colombiano Roger Martínez que no tuvo chances de lucir su juego. El último cuarto de hora lo tuvo a Racing con la intención de controlar la pelota y de hacerse fuerte en ataque, con algún remate al arco de Romero aunque sin peligro.

Ya cerca del final, el cansancio y el desgaste físico de ambos equipos hizo que el espectáculo perdiera brillo para terminar nuevamente empatados sin goles durante los noventa minutos y definir al semifinalista desde los doce pasos. Y en esa instancia Romero, que luego confesaría que se iba "feliz y triste a la vez", porque es "hincha de Racing" y le "dolieron los silbidos de los hinchas", le contuvo los remates a Gonzalo Piovi y Leonardo Sigali para impulsar a Boca a semifinales de Libertadores después de tres años.

Ahora se viene Palmeiras de Brasil

Al empatar 0 a 0 en el partido revancha que se jugó en su estadio, el Palmeiras de Brasil logró el pasaporte a las semifinales de la Copa Libertadores de América, instancia en la que se medirá con Boca Juniors.

El equipo brasileño se aprovechó de la abultada victoria por 4 a 0 en el partido de ida ante el Deportivo Pereira, que se jugó en Colombia, y con ello logró la clasificación.

Anoche Palmeiras tuvo la pelota en la mayor parte del encuentro y la movió con criterio, cuidando que su rival no se torne peligroso en sus ataques. Así, con el paso de los minutos, se afirmó cada vez más y, si bien tuvo chances para marcar, no se hizo drama por aquella diferencia en la ida. Pereira buscó pero quedó en desventaja con la expulsión de Quintero.

EN LA PREVIA

Hubo clima tenso con Romero

Lo bancó. Sergio Romero.

Sergio Romero, el arqueo de Boca, no fue recibido de buena manera por los hinchas de Racing en su regreso al Cilindro de Avellaneda después de 16 años. Se escucharon silbidos contra "Chiquito" y los hinchas de la Academia le pasaron factura por lo que dijo apenas fue contratado por el Xeneize. "Boca es el más grande del país", aseguró entonces. Una frase que generó revuelo y anoche se lo recordaron.

Sin embargo, Chiquito no se inmutó ante el tenso clima y soportó la situación sin realizar gestos. Es más, se acercó al banco de Racing y saludó al DT Fernando Gago, con quien compartió plantel con la selección argentina, con un Mundial de por medio: el de Brasil 2014.