El fiscal porteño, Martín López Zabaleta, dispuso la clausura preventiva de dos de las tribunas populares de La Bombonera por los disturbios, con utilización de pirotecnia incluida, que lanzaron hinchas de Boca en el superclásico ante River. En Boca, uno de sus dirigentes más influyentes admitió que pudo haber ‘falencias‘ del club pero no complicidad‘ en el ingreso de la cohetería.

El representante del Ministerio Público también aseveró que ‘fracasó‘ el operativo que debía impedir el ingreso de fuegos artificiales y banderas de grandes dimensiones como las que se exhibieron a modo de burla por parte de la afición xeneize a su rival. ‘El procedimiento fracasó; ahora hay que determinar por qué ocurrió y quiénes son los responsables‘, explicó López Zabaleta.
La clausura comprende las tribunas en las que se alojaron los hinchas de Boca y en las que se exhibieron banderas alusivas al descenso de categoría de River Plate, se arrojaron fuegos artificiales con los colores azul y amarillo e incluso algunos de ellos explotaron muy cerca del arquero visitante, Marcelo Barovero.
Desde Boca, el secretario general, César Martucci, pareció sorprenderse por cómo entraron la pirotecnia, cuando, según el dirigente, el estadio había sido registrado el sábado y quedó vallado. ‘Alguna estratagema hubo para burlar la seguridad del club y la seguridad pública‘, dijo y ante eventuales cargos aseguró que de parte de Boca ‘pudo haber falencias en el control pero no complicidad porque el más perjudicado pudo ser Boca Juniors‘. Aseguró que si se comprueba ‘las dos tribunas de Boca están clausuradas para resguardar la prueba‘, explicó el fiscal.