La derrota ante Independiente del viernes por 2-0 fue un golpe muy duro para las aspiraciones de regresar a Primera que tiene San Martín. Perdió en una de sus peores producciones de los últimos tiempos y quedó a 7 puntos del tercer puesto cuando restan 5 fechas (15 puntos). Eso lo remarcaron Mauro Bogado y el capitán Cristian Alvarez, dos referentes del plantel y con mucha experiencia en este tipo de definiciones. Ambos dejaron en duda y desechando, con mucha bronca y dolor, que para jugar en Primera habrá que esperar hasta el año que viene.
“Perdimos un partido importante y con esto quedamos lejos del ascenso, por eso en lo que queda (del torneo) habrá que pelear para terminar lo más arriba posible”, admitió Bogado, dando su sentencia del futuro inmediato. Para el volante, en Avellaneda se perdió toda posibilidad de ascenso.
Por su parte, Alvarez dejó en claro cuál es la fórmula y qué debió hace este plantel para subir a Primera División, y que es el mayor déficit del Verdinegro: “Para pelear arriba tenés que ganar de visitante y no se pudo”, agregándole que “tenemos que corregir muchas cosas y cometemos errores que no se pueden cometer”, cuando a esta altura del campeonato y con 5 fechas para el final, ya no hay tiempos para un borrón y cuenta nueva.
Haber ganado solamente un partido de 19 jugando de visitante, ya venía siendo un condena, pero que realmente se sintió en Avellaneda porque la derrota dejo un clima de eliminación por escalar un categoría.
“Estos equipos no te perdonan cuando te equivocas y nosotros erramos mucho. Nunca le encontramos la vuelta y nos faltó ese plus necesario para ganar los partidos”, resaltó Bogado sobre la actitud.
“Teníamos que hacer un mejor partido que en San Juan y no se pudo”, añadió Alvarez, utilizando otras palabras, pero en definitiva con intenciones de anunciar lo mismo que su compañero en el mediocampo.
Y es que San Martín regaló sus sueños e hipotecó esa intención de ascender a Primera. Volvió a desnudar falencias que un equipo con aspiraciones no puede cometer porque no era un partido más, era una final y no la jugó como tal. Por eso perdió y por eso sus jugadores lo reflejaron y pintaron con la realidad en la mano. El objetivo de ascender, está muy lejano. Hubo clima de eliminación en Avellaneda.

