Finalmente el aire llegó. San Martín pudo respirar y de qué manera. Ganó 1-0 y eso en Concepción fue noticia, que se agiganta por ser ante Godoy Cruz en el clásico cuyano y porque esta versión de juego en el debut de Facundo Sava fue muy diferente a la que proponía con Garnero. Ganó por arriesgar, por ser contundente y sobretodo explosivo. La propuesta del Colorado le dio rédito, la de un equipo totalmente ofensivo que de mitad de cancha hacía adelante fue impecable. Ambicioso y con aire renovado, el momento para volver a sumar de a 3 luego de 8 partidos era ayer y lo logró. Tuvo pasajes en los que dejó sin reacción al Tomba y otros, como en el segundo tiempo en el que el desgaste le empezó a pasar factura, que debió cuidar a muerte el gol de Marcelo Carrusca a los 17 de la etapa inicial. Pero cumplió con creces, más allá que deberá analizar Sava que en ciertos pasajes se lo pudo empatar Godoy Cruz, pero eso será más adelante, porque la alegría volvió al Pueblo Viejo. Una bocanada de oxigeno para volver a empezar y de este modo lograr salir de la zona de descenso directo, aunque podría regresar si mañana Tigre derrota a Belgrano.
El triunfo tuvo su sustento en la propuesta. En el juego colectivo y la ambición. Sava le devolvió la titularidad a Maxi Núñez y éste ofreció su mejor versión en ataque con una explosión incontenible. Con Carrusca de enganche, el principal cambio de Sava en su arribo, San Martín tuvo descarga y generador. El “Chelo” jugó suelto y hasta se dio el gusto de anotar el gol. Siendo Diego García el tercero para una sociedad perfecta que aprovechó todo el campo.
El Verdinegro salió decidido a ganar y al minuto Núñez mostró sus credenciales para desbordar y el cabezazo de Carrusca que se fue desviado. Sintonía y armonía con la pelota al piso y jugando muy lejos de Pocrnjic, la explosión estaba al caer. Y fue nomás. Iban 17’ y Núñez mandó el centro preciso al área, que bajó de cabeza Penco y que con total sutileza Carrusca colocó pegada al palo.
La triangulación, un aspecto que ayer dio réditos se repitió a los 30’, que tras el envío de Núñez por el segundo palo García remato y el balón dio en el travesaño. Godoy Cruz contestó ahí nomás con Caruso y su disparo a quemarropa que contuvo Pocrnjic. San Martín dominó los primeros 45’ con claridad, teniendo la pelota y arriesgando.
El complemento siguió con la misma tónica. Y la sentencia estuvo cerca a los 5’, cuando García la pisó para atrás y Wagner, absolutamente solo y con todo el arco, se lo perdió. Que pudo ser 60 segundos después con el frentazo de García. San Martín era puras luces, no obstante todo ese desgaste acumulado le empezó a pasar factura y Godoy Cruz de a poco fue apareciendo con Villar y Olmedo como estandartes.
La posesión se equiparó y a los 18’ el Tomba tuvo la mejor opción cuando tras el centro de Villar, fallaron todos en el despeje y Caruso reventó el travesaño. Luego Rojas metió un “tijera” que exigió a Pocrnjic y otra vez Caruso con una media vuelta que rozó el palo pudo empatar.
El final fue de dientes apretados, con Godoy Cruz encima y San Martín defendiendo todo el desgaste que había hecho para devolverle la alegría a un equipo que anímicamente lo necesitaba y a una hinchada que quería festejar en el clásico.