Después de un primer tiempo más bien flojo, River Plate tuvo ayer 15 minutos a puro fútbol en la etapa final para terminar ganándole con claridad a Huracán 2 a 0 en un partido que le terminó dando mucho aire en la lucha por evitar la Promoción. Los goles de River fueron convertidos por Erik Lamela y Paulo Ferrari, quienes definieron tras recibir sendas asistencias de Mariano Pavone. Justamente los tres fueron las mejores individualidades de un River que se quedó con el triunfo con absoluta justicia ante un adversario que llegó al Monumental preparado para defenderse y al encontrarse en desventaja no supo como modificar su libreto. Con la victoria, River sumergió a Huracán en zona de promoción y le sacó una ventaja de siete puntos, aunque el buen presente de Olimpo de Bahía Blanca -puntero junto a Estudiantes y 18vo. en los promedios- lo mantiene expectante en la lucha por la permanencia. Por caso, una victoria de los bahienses la próxima fecha (reciben a Godoy Cruz de Mendoza) obligará a River a ganarle a Independiente en Avellaneda para no regresar a zona de promoción, donde inició la temporada.

Los primeros 20 minutos del juego fueron decididamente malos, con un Huracán que arribó al Monumental con una postura inequívoca, la de intentar defenderse y apostar a una réplica o pelota parada para lastimar a River. El conjunto millonario manejó el balón y se dispuso en posición ofensiva, pero fue inconexo y careció de imaginación. Se repitió casi siempre y cayó una y otra vez en el embudo que planteó Huracán, que ni lograba salir de contra, porque cuando recuperaba el esférico lo perdía muy rápido. El equipo de Juan José López mejoró levemente a partir de los 20 minutos y, si bien estuvo lejos de convencer, debió terminar el primer tiempo en ventaja porque generó al menos cuatro situaciones de gol. La primera a los 23, tras una jugada elaborada desde un tiro libre, que terminó con un centro de Walter Acevedo y cabezazo del paraguayo Adalberto Román que se fue por encima del travesaño. En la segunda, Alexis Ferrero pasó al ataque y envió un centro que David Angeloff sacó al córner cuando Ferrari llegaba para empujarla. River quedó nuevamente cerca de gol en otras dos ocasiones. Acevedo dejó solo a Ferrari delante de Gastón Monzón, pero el lateral-volante no pudo dominar frente al arquero. En la más clara, Pavone bajó la pelota para Manuel Lanzini, quien sacó un zurdazo que dio en la base del palo derecho. En el segundo período, tras la reanudación, Miguel Brindisi lo sacó a Angeloff, quien había tenido dificultades para controlar el lado izquierdo del mediocampo, y lo colocó a Claudio Guerra en un cambio ofensivo. Sin embargo, River no le dio tiempo a nada, ya que a los 14 minutos ya estaba 2-0 arriba. A los 2 Lamela se lo perdió casi debajo del arco y a los 5 se tomó revancha tras la mejor jugada colectiva de River. Acevedo tocó para Pavone y el delantero lo dejó solo a Lamela, quien definió con gran categoría sobre el cuerpo de Monzón. Siguió intentando River y un cabezazo de Pavone resultó apenas desviado, hasta que a los 14 lo terminó de resolver con una contra: Lamela abrió hacia la derecha para Pavone y el centro del ex Estudiantes encontró libre de marcas a Ferrari para el cabezazo goleador. Huracán careció de respuestas y apenas inquietó con un par de cabezazos de Javier Cámpora que salieron desviados. River también tuvo chances para aumentar, pero no le hizo falta.

Para evitar sorpresas, López reforzó la mitad de la cancha con el ingreso de Adrián Cirigliano y Carlos Arano y River dejó correr el reloj con la tenencia de la pelota. Así, se aseguró un triunfo clave en la lucha por la permanencia, que fue festejado con fervor por la multitud que lo acompañó en el Monumental.

Con esos 15 minutos de furia en el segundo tiempo le alcanzó y le sobró para deshacerse de un Huracán demasiado tibio.