El presidente de River Plate, Daniel Passarella, afirmó ayer que el volante Diego Buonanotte "mintió" al decir que donó al club el 15 por ciento que le correspondía por su transferencia al Málaga, de España. En su primera conferencia de prensa tras el descenso de River Plate a la segunda categoría del fútbol argentino, Passarella intentó brindar explicaciones sobre todos los temas polémicos que aquejan su gestión al frente del club.
El Kaiser apuntó asimismo que la barra brava de River, Los Borrachos del Tablón, "no fueron responsables de los incidentes" en el partido ante Belgrano de Córdoba en el Monumental, en el que su equipo perdió la categoría.
Tras la presentación del plantel que afrontará la temporada de la B Nacional y de leer una Declaración de Principios, al titular "millonario" se le preguntó si la versión de Buonanotte sobre el porcentaje que debía percibir de su venta era mentira y respondió: "Sí". Y le cedió de inmediato el micrófono al vocal Diego Mancusi, quien se encargó de explicar la situación.
"Buonanotte es un hijo dilecto de nuestro club y creemos firmemente que ha habido algún tipo de confusión. El dejó de cobrar 458.000 dólares en concepto del contrato que tenía vigente y de la deuda que el club tenía con él", manifestó el dirigente para aclarar el caso.
Anteriormente, Passarella aseguró que "lo que hizo el futbolista con la plata es problema de él", ya que la dirigencia "ha cumplido con todo lo estipulado", y además recordó que tanto él como el vicepresidente, Diego Turnes, mantenían una excelente relación con el jugador, transferido al Málaga de España.
Respecto de la presencia de barrabravas en el vestuario del árbitro Sergio Pezzotta durante el entretiempo del partido por la promoción frente a Belgrano de Córdoba, Passarella apuntó: "Mi postura frente a los barras es siempre la misma, aunque mi opinión en este momento no tiene valor, porque el tema se tiene que resolver en la justicia. Pero los conocidos Borrachos del Tablón no tuvieron incidencia en ese momento", afirmó.
A pesar de las imágenes difundidas, el Kaiser se apoyó en que las acusaciones que recibió en su gestión "son todas sospechas y que no hay pruebas, nos acusan injustamente", y confesó "tener la conciencia tranquila" para seguir al mando del club y "devolver a River a la categoría que nunca debió dejar".

