Dos mallas arcoiris logró en Innsbruck la nueva promesa del ciclismo belga. El martes la de crono y ayer la de pelotón.

 

Si bien Patrick Lefevere, patrón del equipo Quick-Step confió que lo irán llevando de a poco ("ya que necesita descubrir de qué se trata el ciclismo profesional") y lo insertarán recién en 2020 en el calendario World Tour, donde las carreras de un día superan -la mayoría- los 200 kilómetros; es factible que al "Super pibe", a quien se refieren como "El Messi del ciclismo", "El nuevo Eddy Merckx" o, simplemente "La Bestia"; se lo empiece a mostrar en la próxima Vuelta a San Juan.

El chiquilín que este año ganó todo lo que corrió en su categoría ha demostrado, con los tiempos de sus contrarreloj y demostraciones en las pruebas en pelotón que, competencias de los calendarios continentales, como la Vuelta a San Juan o cualquiera clásica de un día, servirán para hacer los primeros palotes en el profesionalismo. El Quick Steep vendrá a San Juan y son muchas las chances que su novel estrella debute la primera carrera que tiene el America Tour.