Jugar en la Esquina Colorada tiene sus cosas a favor y de las otras. Y esta vez, a este Del Bono le terminó jugando en contra porque si bien no perdió, no pudo ganar un partido trascendental frente al complicado Argentino de Mendoza. Fue empate 1-1, dejando la sensación de que en otro piso, en otro escenario, podría haber resuelto todo a su favor. Le costó demasiado acomodarse, no pudo poner la pelota a ras de suelo, y con eso terminó dilapidando algunas ocasiones de gol en especial en el segundo tiempo. Le tocó ir desde atrás porque a los 13’ Argentino lo golpeó feo en la primera pelota que tuvo a favor en un corner. La metieron al corazón del área, la bajó el Tanque Giménez y Paul Martín estuvo ahí, atento, para definir y abrir sorpresivamente la cuenta cuando se estaban terminando de acomodar. La reacción del Bodeguero fue a puro corazón. Se fue encima de Argentino, sin mucha claridad, y sobre los 27’ acertó en una jugada que se ensució con la caída de Michel García, dejando un rebote que el Chino Chávez aprovechó a full para establecer el empate.

Lo que quedó de primer tiempo fue para ver cómo Argentino se empezaba a acomodar para la contra y como Del Bono, sin el piso a su favor, intentaba jugarlo de la mano de Juan Ruiz. En la segunda parte, se acentuó el dominio del Bodeguero. Se fue encima, metió más presión y generó un par de chances netas de gol que no terminaron en el arco de milagro. Michel García tuvo la más clara en una gran mediavuelta que se fue apenas desviada y Daniel Cejas terminó siendo el protagonista cuando dilapidó tres ocasiones clarísimas de gol, rematando defectuosamente. Del Bono quería y no podía. Insistía pero ya no tenía más recursos físicos ni futbolísticos como para cambiar una historia que pudo ser otra. Esta vez, jugar en la Esquina Colorada le terminó jugando en contra a un equipo que puede dar más.