Recuperó la esencia de ese Del Bono aguerrido y que tira para adelante hasta el minuto final. Gracias a ello y a su amor propio que lo ayudó a seguir adelante volvió al lugar donde había permanecido por trece fechas consecutivas y que había perdido la fecha pasada. Ayer el Bodeguero derrotó en su casa por 2-0 a Unión, en un partido que empezó una hora más tarde de lo previsto debido a violentos incidentes entre las hinchadas (ver aparte), en la 22da. fecha del grupo cinco del Torneo Argentino B.

El local se paró para ganar, con mucha firmeza y actitud. Comenzó de entradita a querer cambiar la historia (había perdido dos fechas seguidas de local) con un pelotazo del "Luto" Molina que no pudo conectarle bien al balón y por ello se fue desviado.

Posteriormente, el Bodeguero volvió a intentarlo con un remate de Matías Molina, pero que Biasotti se encargó de mandar afuera.

Unión no se encontraba a sí mismo. Muchos pelotazos y ni un pase bien dado. Por ello perdía reiteradamente la pelota. Esto ocasionó que sus rápidos delanteros (Javier Villaseca y Federico Acevedo) tuvieran un escaso contacto con el balón.

Del Bono fue haciendo pie de a poco y copando el terreno para mandar sobre su rival. Lo intentó el Mago Prieto de cabeza en dos oportunidades, pero en la primera se fue por arriba del travesaño y en la segunda desviada.

El Azul llegó solo una vez en la etapa inicial con un remate de Villaseca que Pelayes controló sin sobresaltos.

En el complemento el local comenzó ganando de entrada. A sólo un minuto, y después de la salida de arco de Biasotti, Mariano Núñez capitalizó la redonda, se la llevó y pasó a la defensa y luego remató cruzado para abrir el marcador a favor de los de la Esquina Colorada.

Comenzaba otro juego. Pero de a poco el equipo de Villegas se fue atrasando y su rival fue ganando terreno. Pero ni así. Unión no podía controlar la pelota y estaba impreciso. Lo intentó con un pelotazo de Sánchez que se fue por arriba del horizontal.

El partido cayó en un pozo. Ahí vinieron los cambios para darle aire a ambos equipos. En el local para mantener los puntos y en la visita para igualar el marcador.

Sobre el final Unión se le fue encima pero quedó descubierto ya que en el afán de empatar hasta Biasotti subía. Lo intentó con dos cabezazos, uno de Steiner y otro de Pascual, pero ambos se fueron afuera. Y de un tiro libre, un cabezazo de Monassa que despejó la defensa. Fue así que quedó una contra para Del Bono con un solitario arco. El Pelado Díaz corrió, pasó a un par de jugadores que estaban en el medio de la cancha, siguió y definió al arco solitario para decretar el 2-0 de su equipo y liquidar la historia.