El tandilense Juan Martín del Potro, número uno del tenis argentino y noveno favorito, perdió ayer ante el español David Ferrer, séptimo preclasificado, por 6-3, 6-2 y 6-3, en los octavos de final del abierto de Wimbledon, en Londres, tercer Grand Slam de la temporada, donde ya no quedan argentinos.
El partido, que debió haberse disputado el lunes pero fue postergado por la lluvia, se decidió en favor del alicantino, de 30 años, tras una hora y 58 minutos de juego.
El match se desarrolló en la cancha central, pero estuvo demorado media hora en su inicio como consecuencia de las malas condiciones climáticas en Londres, lo que obligó a cerrar el techo corredizo, una estructura de 5.200 metros cuadrados y 1.000 toneladas.
Del Potro, noveno cabeza de serie, no tuvo el mismo nivel que en las rondas anteriores, falló en puntos claves y no pudo pasar a los cuartos de final de Wimbledon, instancia que buscaba alcanzar por primera vez en su carrera.
De esta manera, el español, número cinco del mundo, venció por segunda vez este año a Del Potro, ya que la anterior fue en marzo pasado sobre el cemento de Miami por un doble 6-3.