El empresario Carlos Avila reveló haber encontrado datos de cuentas bancarias en el exterior por 30 millones de dólares a nombre de Julio Grondona, sus hijos y un colaborador fallecido, y que la intención del presidente de la AFA quería quedarse con la explotación propia de la televisación del fútbol a la espera de que el Estado deje “de pagar uno o dos meses”.
Avila, quien admitió haberle hecho una cámara oculta “por diciembre” último a Grondona y que fue transmitida por dos canales de TV, confió que la empresa Torneos y Competencias es el “socio oculto” de Grondona, al punto, dijo, de “ser la única productora en el mundo” que tiene los derechos de transmisión de Eliminatorias mundialistas.
En un extenso reportaje, Avila aseguró que la cámara oculta fue propuesta por su abogado Mariano Cúneo Libarona, a partir del hallazgo de unas carpetas que habrían pertenecido al socio del empresario, Luis Nofal, ya fallecido, en el que constaban supuestas cuentas bancarias en Ginebra y que, según el creador de TyC Sports, están a “nombre de Grondona, sus hijos y de (Daniel) Pellegrino”, quien era un secretario del jefe de la AFA. “Las cuentas son muy importantes por las cifras. Allí hay unos 30 millones de dólares”, afirmó Avila y agregó que la presentación judicial no es una denuncia contra Grondona, sino que pidió que “se investigue las cuentas que encontré dentro de los archivos míos”.
Grondona es frecuente que viaje a Suiza ya que la sede de la FIFA está en Zurich, otra de las ciudades importantes de ese país. Ante ello, Avila contó que le explicó a Cúneo Libarona lo ocurrido y que le propuso hacer la cámara oculta a Grondona, que puntualizó, dura “unas tres horas” y que toda está en manos del juez de la causa. “Mi abogado me dice “hagámoslo público porque no sabemos qué acciones puede tomar Julio y demás”, dijo.
Admitió que Grondona lo sorprendió en esa reunión en la que lo filmó y arriesgó: “Se fue de boca”.
Al ser consultado sobre las advertencias de Grondona en cuanto a que se negaría a una negociación con Uruguay incorporando al empresario Paco Casal pese a reconocer que habría habido una conversación al respecto entre los presidentes José Mujica y Cristina Fernández de Kirchner, Avila refirió lo que él considera el principal propósito de Grondona con la televisación. “Durante mucho tiempo lo ayudé a Julio en la parte económica, luego estuvo con Clarín y cuando encontró un nuevo padrino, el gobierno nacional, se fue con el gobierno nacional”, sostuvo Avila, quien en la década del ‘80 y ‘90 fue socio de Grondona.