El Torneo Internacional de Fútbol Infantil de Trinidad - COPA DIARIO DE CUYO, se está organizando por décima octava vez, algo que no es poco. Gran parte de este campeonato que lleva tantas ediciones lo realizan los chicos, porque son ellos quienes los juegan, pero detrás de todo esto hay mucha gente que trabaja sin parar, algunos inclusive todo el año.

Las competencias del certamen, se realizan en diferentes canchas y en turnos distintos. La cancha de Trinidad en el Bº Atlético, las instalaciones del mismo club, pero por calle Mendoza (ex Los Andes) y las del SEC. En esos lugares siempre se van a encontrar personas que tiene gran responsabilidad, como lo son los planilleros y aquellos que están en la organización.

Estéban Grinalt, Jesús Molina y Adrián Pérez son los encargados en la mañana de estar en las instalaciones del Bº Atlético, aguantando el calor, el viento y las lluvias, como la de días atrás.

"Nosotros somos planilleros, hacemos que firmen los técnicos y también los chicos. Nos encargamos de revisar los documentos y que todo esté en orden, que no falten pelotas, ni nada de eso. Y de paso nos tomamos una gaseosa\', decían a modo de broma los jóvenes responsables.

"Siempre colaboramos con el club, en este tipo de torneos, porque nosotros hemos jugado cuando éramos pibes y nos gustaba, entonces una forma de devolverle al club todo lo que nos brindó cuando éramos chicos, es ayudando, aunque sea haciendo poco, pero lo que importa es ayudar\' dijo Jesús Molina, ex jugador de Trinidad, que actualmente está vacacionando en la provincia, ya que juega en la CAI (Comodoro Rivadavia) hace un año.

Estéban Grinalt y Adrián Pérez explicaron que ellos se dividen en turnos "a la mañana estamos nosotros, siempre minutos antes de las 8 ya estamos acá, y al medio día, después de las doce nos vamos, hasta el otro día, en la tarde hay otros chicos\', dijeron los jugadores que colaboran y pertenecen a Trinidad.

"La forma de pago del club, es con una gaseosa y semitas\', expresó Federico Ortiz, riendo y acercando una sombrilla para poder hacerle frente a los más de 25 grados que habían en la mañana de ayer, que sumados a una elevada humedad, hacían sentir el calor de una forma más intensa. Es por eso que los chicos trabajaban, con sombrilla, mate, y semitas.