Los dos torneos aparentan ser casi iguales. Las similitudes son muchas. Pero claro, resta saber cual será el final. El 29 de mayo de 2004 Desamparados ascendía al Argentino “A” y hoy, doce años después tiene la chance de hacerlo este domingo cuando reciba a Agropecuario de Carlos Casares en la revancha de la final del Federal “B”.

Entre las similitudes, está uno de los artífices de ese ascenso y quien hoy es el único sobreviviente de aquella hazaña: Ricardo Dillon. El director técnico sueña con alcanzar el mismo objetivo, dice que ‘volvió para poner a Desamparados en su lugar’ pero antes, remarcó las diferencias con aquel certamen. “Son campeonatos distintos. En ese momento no había una presión por parte de todos los clubes por salir de la categoría. Hoy es una necesidad de todos ascender. Nadie quiere jugar el Federal “B” porque todos odian esta categoría”, comenzó diciendo el entrenador. “¿Por qué se desvirtuó? porque se profesionalizó mucho el Argentino A. Antes el camino era más corto. Recuerdo que arrancaron ese torneo cerca de 124 equipos, se iban eliminando con mucha anterioridad. Si bien es cierto que era casi la misma cantidad que ahora, esa vez era más llevadero”, contó el Flaco.

Y sí, aquel torneo era más corto, pero nunca menos fácil. Desamparados debutó un 8 de enero integrando zona junto a Unión de Villa Krause, Concarán de San Luis y Pueyrredón de Villa Mercedes. Ganó su grupo y después, en lo cruces de ida y vuelta, se fue limpiando rivales de distinta geografía y con muchas pretensiones. Primero fue Palmira de Mendoza, después Concarán de San Luis, más tarde Guaymallén de Mendoza y en los tramos finales se cruzó con El Linqueño (en definición por penales) y en Puyuta terminó festejando el ascenso un sábado 29 de mayo ante Rosario Puerto Belgrano, al que había goleado en la ida por 4-0.

En el 2004 Desamparados, con un humilde equipo, eliminó a clubes con un gran poder económico como Luján de Cuyo o El Linqueño y en esta temporada, también hizo lo propio dejando sin chances a Racing de Córdoba, Ben Hur de Rafaela o el mismísimo Huracán Las Heras. “Eran equipos que tenían mucho poder. Los méritos y las sensaciones son las mismas que ahora, todos queremos ser campeones, tenemos las ansias de que podemos lograrlo”, contó el entrenador y siguió recordando aquel equipo: “Era un grupo muy joven, con muchos jugadores del club que tenían todas las ganas de salir de San Juan y ser convertirse en profesionales. Era un equipo que jugaba de memoria. Guardo mucho cariño con cada uno de los integrantes de ese equipo. Era un gran grupo humano, igual al que hemos conformado ahora”, rememoró.

En aquel torneo, Sportivo terminó invicto en los 18 encuentros disputados. Esta vez la historia es distinta, porque ante el Sojero en Buenos Aires cayó 0-1 en la ida, aunque claro, la revancha es este domingo y ante su gente Dillon tiene bien claro lo que busca: “Quiero devolver a Desamparados a la categoría de la que nunca tendría que haber bajado, uno puede subir y puede bajar pero en el Argentino A una vez que llegas no tenés que bajar nunca más”, expresó Dillon, el mismo que a la cabeza de ese plantel en el 2004, buscará el domingo repetir esa hazaña.