La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, manifestó ayer su "dolor" y la "solidaridad con las familias de las víctimas" del derrumbe de un viaducto en Belo Horizonte, cuyo gobierno local dispuso tres días de duelo en la ciudad. Por su parte, la empresa constructora Cowan, a cargo de las obras del viaducto, lamentó lo ocurrido y anunció el comienzo de las investigaciones sobre el origen del accidente.

"Con tristeza supe del derrumbe del viaducto en Belo Horizonte. El gobierno se pone a disposición de la Prefectura y las autoridades de Belo Horizonte para lo que fuera necesario. En este momento de dolor, dio mi solidaridad para las familias de las víctimas", escribió ayer la jefa del Estado en Twitter. Por su parte, el prefecto de Belo Horizonte, Marcio Lacerda, dispuso tres días de duelo en la regional. En tanto la constructora Cowan, responsable de la obra, informó que "lamenta profundamente lo ocurrido con el viaducto sobre la avenida Pedro I. En este momento las prioridad es el apoyo a las víctimas y a sus familiares". "La empresa, firma que ya encomendó a un equipo técnico para iniciar las investigaciones y definir las causas del accidente".