San Lorenzo venció anoche a Independiente por 1-0, de local, en el clásico mayor de la fecha y alcanzó en la punta a Rosario Central, aunque sea transitoriamente porque Boca, de ganar hoy, los pasará. El gol del conjunto que dirige Edgardo Bauza lo convirtió el volante Héctor Villalba, a los 44 minutos del primer tiempo.
El primer tiempo tuvo a Independiente como dominador, con un Federico Mancuello cerebral y un Claudio Riaño punzante. El equipo de Jorge Almirón, con un 4-4-2 flexible, dispuso de las mejores chances de gol, pero falló una y otra vez en la definición.
Mancuello (11m. y 17m.), Riaño (19m. y 41m.) y Matías Pisano (26m.) estuvieron muy cerca de convertir, pero el arquero Sebastián Torrico y su falta de puntería privaron al conjunto de Avellaneda del gol.
Ante esto, San Lorenzo, con su tradicional 4-2-3-1, se vio sorprendido por la presión de su adversario, le costó hacer pie en el campo de juego, aunque tuvo sus oportunidad de riesgo por intermedio del sanjuanino Emmanuel Mas (7m.). El lateral alcanzó un gran rendimiento confirmando su buen momento.
Pero el equipo de Bauza estuvo lejos de jugar bien, aunque sobre el final del primer período se puso arriba en el marcador con un golazo de Villalba, a los 44 minutos.
El segundo tiempo tuvo un desarrollo más parejo: San Lorenzo ajustó las marcas y ocupó mejor los espacios e Independiente estuvo más impreciso y perdió profundidad.
Más allá de las intenciones y planteos de ambos equipos, el partido ofreció poco y de hecho prácticamente no hubieron llegadas a los arcos.
Los entrenadores movieron los bancos, Bauza para conservar la ventaja y Almirón para revertir el marcador, pero nada varió.
Así San Lorenzo trepó a la punta, compartida con Central. Y el Rojo quedó relegado en la lucha por el título, aunque todavía falta mucho camino por recorrer.