España, 28 de noviembre.- Quizá algún día el nombre de Takefusa Kubo brille tanto como el Lionel Messi, con quien incluso podría llegar a compartir vestuario, con una “Pulga” ya entrada en años, claro.

El niño japonés tiene apenas 10 años y ya fue fichado por el club catalán, donde juega en uno de los equipos juveniles. Los últimos reportes indican que el prodigio marcó dos goles y colaboró ampliamente en la victoria de su equipo ante el Escola F. Gava.

Kubo lleva la 9 en su espalda y ya desde los ocho años deslumbraba a los “cazatalentos”, que empezaron a seguirlo cada vez más de cerca con intenciones de ficharlo. Eso fue posible porque coincidió con un traslado de la madre del pequeño Takefusa a España, por trabajo. Es que el Barça tiene como política no contratar a menores extranjeros de 13 años.

Por sus primeros destellos tuvo como premio jugar un torneo en Bélgica con los infantiles del Barça, donde se coronó como mejor jugador de esa competición. Después, volvió a Japón, pero el destino de su madre lo unió en definitiva al del equipo azulgrana.

A diferencia del resto de las promesas que forma el Barça, no vive en La Masía –allí donde se crió futbolísticamente Messi- sino en su domicilio particular, junto a su familia. La historia dirá si el Barcelona volvió a acertar con una apuesta tan precoz.