Siempre lleno. Desde las 13 cuando se empezaron a servir las viandas hasta pasadas las 15 horas, la carpa en donde se sirvió el almuerzo en El Palomar no dio abasto con los 1.200 chicos que compitieron allí.

En una carpa gigante, al costado de la pista de atletismo del Centro Deportivo que posee la Universidad Nacional de San Juan o más conocido como El Palomar, cientos de chicos hacían una larga fila para recibir su vianda de almuerzo cerca de las 14 horas de ayer. El inmenso comedor montado allí contaba con sillas y mesas para 300 personas, por eso fue recibiendo a los pequeños deportistas en tandas. En total se entregaron a lo largo del día 3.600 viandas: 1.200 de almuerzo en donde el menú para la primera jornada fue milanesa con ensalada, agua saborizada y de postre ensalada de frutas. Las restantes 2.400 viandas correspondieron al desayuno y merienda debido a que la actividad arrancó a las 8 de la mañana y se extendió hasta pasadas las 18.

El Palomar fue el escenario que mayor actividad recibió durante el día ya que allí se desarrollaron pruebas de atletismo y partidos de hándbol, por eso fue el comedor que más viandas entregó.

La postal se repitió en las canchas de fútbol, en El Pinar donde se desarrolló el ciclismo, en tanto que en uno de los quinchos más grandes del Banco Hispano fue donde se montó la cocina y lo mismo sucedió en la UVT donde se desarrolló el hockey sobre patines.

Cabe destacar que todas las comidas están basadas bajo normas nutricionales de las empresas Food Service y Mauro Novelli.