El volante ofensivo Patricio Rodríguez obró como un revulsivo para el accionar de Independiente cuando ingresó en las postrimerías del primer tiempo del clásico ante Racing Club, pero admitió que la "regularidad" en el juego es su "asignatura pendiente".

"Es cierto que ya muchos dicen que sigo siendo el "Patito" y la verdad que yo siento lo mismo, que mi asignatura pendiente es la regularidad en el juego", sostuvo ayer Rodríguez al cabo del entrenamiento que Independiente llevó a cabo en su estadio.

El día después de la victoria obtenida en el clásico sobre Racing Club (1-0) fue un bálsamo que contribuyó a descontracturar las caras de preocupación de la semana previa, tan ajetreada desde lo futbolístico como desde lo institucional, a partir de la derrota por 4 a 1 frente a Godoy Cruz.

Pero la llegada de Antonio Mohamed a la dirección técnica cambió el panorama durante los días de preparación del partido con Racing (apenas cinco) y el triunfo fue el aire fresco que, al menos circunstancialmente, mitigó tanta interna caliente que pululaba por el club. "Fue el partido que había que ganar y se logró. Porque esto era algo que no solamente necesitábamos los jugadores, sino también los hinchas, los dirigentes y por supuesto el nuevo cuerpo técnico, para empezar esta etapa con buen pie", explicó Rodríguez.

"Personalmente también quedé contento por mi actuación, sobre todo porque creo que pude ayudar al equipo en un momento complicado", describió.

Ahora a Independiente se le viene All Boys por el campeonato local y el próximo martes 19 recibirá a Defensor Sporting, de Uruguay, por la Copa Sudamericana. "Todos los partidos es lindo jugarlos, pero ahora tenemos la Copa por delante y habrá que ver como se organiza todo", apreció. "Pero ahora hay que disfrutar y agradecerle a (Hilario) Navarro por todo lo que nos salvó ayer. Ojalá este clásico haya sido sea el partido para el despegue, porque lo necesitamos mucho", insistió.