Rosario Central le dio otro golpe a Boca, que venía lastimado por la caída en el Superclásico, al vencerlo 2-1 en un Gigante de Arroyitos que lució colmado, y así lo dejó a sólo tres puntos del último. Boca se había puesto en ventaja a los 13 minutos con un gol de Emmanuel Gigliotti en posición adelantada, pero en el segundo tiempo, Franco Niell, el hombre más incisivo, y Alejandro Donatti dieron vuelta el resultado. Boca suma cuatro partidos sin ganar, quedó a tres puntos de Racing, último en la tabla, y no pudo reponerse del sacudón que significó perder el superclásico en La Bombonera, sólo cuatro días atrás.
La visita amagó con cambiar la historia desde el comienzo cuando Erbes disparó combado muy cerca de un ángulo tras un desborde y centro desde la izquierda del Burrito Martínez, el jugador que más se movió en busca del ataque. Los primeros minutos fueron de Boca, que a los 13’ llegó al gol a través de un Gigliotti en posición ilícita. Porque el centro de Sánchez Miño, otra vez desde la izquierda, lo conectó Martínez de cabeza y empujó Gigliotti casi un metro adelantado. Ni el árbitro Fernando Rapallini ni el juez de línea Yamil Bonfá vieron la irregularidad.
Central falló sobre todo por los laterales y recién tuvo una llegada clara a los 39’ con un pase en profundidad de Nery Domínguez a Niell (ingresó por Walter Acuña, lesionado), quien dio el pase al medio y Abreu disparó por sobre el travesaño. Al minuto de iniciado el segundo tiempo Central tuvo el empate con una jugada de Jesús Méndez para Aguirre, quien lanzó una volea y Orión sacó al corner. En seis minutos Boca tuvo las dos últimas llegadas, pero Gigliotti, tras otro pase de Martínez, desperdició la chance clarísima al rematar muy mal, y luego fue una contra por izquierda que terminó del otro lado con un remate fortísimo de Gago que dio en el travesaño.
Central no parecía tener respuestas más allá del área rival pero a los 26’ Becker dio el pase frontal a Abreu en la puerta del área, el uruguayo con una media vuelta se la dio justo a Niell y sin que Grana pudiera intervenir, concretó la igualdad ante la salida de Orión. Pareció que se conformaba Carlos Bianchi con el empate al poner al zaguero Claudio “Chiqui” Pérez y sacar a Erbes y al minuto llegó el segundo de Central. Fue un corner de Méndez, ex Boca, la peinó Abreu, por el segundo palo, entró Domínguez y la pelota dio en el poste, y en el rebote Abreu la pasó a Niell, quien se la acomodó de taco al defensor Alejandro Donatti para que defina ante Orión.
Fue mucho para Boca, que ya se había despedido del partido cuando aún iba en ventaja. Los quince finales transcurrieron casi por inercia, con un equipo conforme y el otro prácticamente resignado.

