Boca ya está en San Juan y sólo falta que se marquen las 18,15 de mañana para que las expectativas se hagan realidad cuando ingrese al Estadio del Bicentenario para enfrentarse ante San Martín. Ayer, bajo una temperatura elevada, el conjunto de Julio César Falcioni fue recibido con el signo distintivo de esta provincia, el sol que estaba a pleno a las 16,45 cuando el avión arribó al Aeropuerto Domingo Faustino Sarmiento y no a las 21 como el secretario de Seguridad, Miguel González, le había señalado a DIARIO DE CUYO. Cerca de medio centenar de hinchas sanjuaninos llegaron hasta el lugar para ver a sus ídolos y luego los siguieron hasta el hotel donde se hospedaron.

El primero en asomarse en la sala de arribo fue el técnico Falcioni, quien levantó su mano y saludó a los fanáticos que esperaban para sacarse fotos con sus ídolos. Detrás apareció todo su cuerpo técnico y minutos después los jugadores entraron en escena.

Fue el mismo entrenador del actual campeón argentino quien abrió camino entre la gente buscando el colectivo que luego los trasladó y antes de subirse prendió un cigarrillo, y amablemente se detuvo para sacarse fotos con los sanjuaninos.

Cristian Erbes fue uno de los primeros hombres xeneizes en salir y rápidamente fue contenido por los hinchas que le pidieron autógrafos mientras los flashes eran moneda corriente. Uno a uno fueron saliendo del aeropuerto para cerrar la fila Walter Erviti.

De allí se trasladaron al hotel Viñas del Sol, en Santa Lucía, escoltados por la policía y por detrás una caravana de autos que no se quedaron conformes y quisieron verlos por un rato más. Aunque en el hotel una valla se los impidió y mirando a Somoza, Schiavi, Silva y Mouche que fueron los últimos en descender, el contacto de Boca con los sanjuaninos se cerró.