Jaguares, la franquicia argentina en el Super Rugby, arrancó con el pie derecho su participación en el torneo al conseguir un histórico triunfo como visitante ante los sudafricanos de Cheetahs por 34-33, en el Free State Stadium de Bloemfontein. El equipo dirigido por Raúl Pérez logró un triunfo heroico ya que a los 25 minutos de la primera parte perdía por 24-3 y jugaba con dos hombres menos.
Fue un partido durísimo, por momentos una batalla. Los sudafricanos estuvieron al frente casi todo el encuentro, pero los argentinos, con buen manejo de pelota, lograron un éxito que los va a inflar anímicamente de cara a lo que viene. Buenas labores de Agustín Creevy, Nicolás Sánchez, Tomás Lavanini, Santiago Cordero y Emiliano Boffelli en el equipo que vistió camiseta naranja, que el próximo fin de semana visitará a Sharks, acaso el rival a vencer en la Conferencia 2 del grupo sudafricano.
Los rugbiers argentinos tuvieron la capacidad de superar la expulsión de sus medios a la vez, Martín Landajo y Nicolás Sánchez, cuando finalizaba la etapa inicial y el dominio sudafricano era casi total. Muy pocos deben haber pensado que la victoria en el debut podía hacerse realidad. Pero entonces, apareció otro punto fuerte de este grupo de jóvenes: la rebeldía ante la adversidad. Solo así, sacaron adelante un juego complicadísimo y que en el cierre pesó más el temple de Jaguares, cuyos forwards, dominados en gran parte del match, se llevaron por delante a sus pares y aguantaron en campo ajeno para sellar el triunfo en un día histórico para el rugby argentino.
Ahora, la ilusión de hace un buen Super Rugby se potencia cada día más.