No fue como otras veces anteriores, en la que los resultados iban cambiando y, por ende, iban variando las situaciones de cada uno de los implicados. Eso sí, salió igual de emocionante y la gente lo demostró siguiendo la jornada sabatina con los auriculares en los oídos. Es que, mientras miraban el partido de su equipo, escuchaban por radio a los otros dos que les interesaba. Eso pasó acá, en San Juan, pero se dio idéntico en Avellaneda y La Paternal.

De entrada nomás, quedó aclarado que, desde la AFA, no le darían ventaja a ninguno. Por eso, el partido en el “Hilario Sánchez” largó con ocho minutos de retraso. El árbitro Maglio no dio el pitazo inicial hasta que no le informaron que arrancaban Argentinos-Colón (también esperaron el mismo tiempo) e Independiente-San Lorenzo (se retrasaban por culpa del humo y de los hinchas). En el minuto a minuto propiamente dicho, todo se definió rápido. Es que a los 19’ llegó el gol de Luna para San Martín y eso mandaba a Independiente a la B Nacional. Y el Verdinegro le sacaba una mejor ventaja a Argentinos. Pero a los 9’ del complemento (los partidos iban exactamente simultáneos) Anangonó anotó para el Bicho, que emparejó a San Martín y hundió aún más al Rojo. El segundo del Verdinegro sirvió para aclarar más las cosas. Sanjuaninos y Bichos, con esperanzas. Independiente, al horno.