Ya había amargado el buen partido de San Martín en el Apertura pasado cuando anotó el gol de triunfo. Fue el 11 de septiembre del año pasado cuando el Verdinegro le hizo un gran partido pero se quedó sin nada por aquel gol de Walter Erviti en el complemento que a lo postre le dio el triunfo a los de Falcioni.
Ayer, la historia de repitió y el volante xeneize volvió a convertir, otra vez en el segundo tiempo, para romper la paridad en el resultado y quebrar un parejo y ordenado partido que estaba haciendo San Martín, para convertirse en el verdugo de los verdinegros en el segundo juego de la temporada entre ambos.
“Éste es un gran triunfo porque San Martín juega muy bien y a nosotros sirve para seguir prendidos. Pudimos convertirle y romper el empate ante un rival muy duro y que trata bien el balón”, contó al final del partido el verdugo de San Martín, que ayer lo volvió a amargar.