Parece mentira que en un suspiro se resuman poco más de dos horas y media de carrera. El relato de menos de medio minuto, tiempo en el que los ciclistas cubrieron los últimos 600 metros de recta hasta la meta, alcanza para contar una prueba que tuvo de todo, pero que desde su inicio estaba predestinada a un final en sprint masivo. Y, en ese duelo entre velocistas predominó el catamarqueño Darío Díaz (Municipalidad de Pocito), quien faltando 30 metros superó como una exhalación al bonaerense Marcos Crespo (Agrupación Virgen de Fátima) y cruzó la línea de meta con media bicicleta de diferencia a su favor.

El triunfo del municipal pocitano equilibró la temporada en una victoria para cada uno de los equipos grandes. La victoria de Díaz se potencia porque los azules del Sur tienen su plantilla incompleta. Por distintos motivos los dirigidos por Ernesto Fernández no cuentan con el oficio y jerarquía de ciclistas como Gerardo Fernández, Juan Pablo Dotti y Juan Gáspari, quienes retomarán su compromiso en diciembre.

La competencia, que se desarrolló en horario matutino contó en el punto de partida con 102 ciclistas. Hubo ausencias importantes, como las citadas en el conjunto pocitano y la del mendocino Ignacio Gili, en el equipo "piquetero". El "Chueco" tenía permiso para correr el "Desafío Cuesta del Viento", de mountain bike, el que ganó con gran autoridad (ver páginas 8 y 9).

Los cuatro primeros, de los ocho giros fueron de tanteo. El fuerte viento se hacía sentir y los pedaleros de los equipos fuertes guardaron fuerzas porque cualquier intento en solitario podría pasar factura en la segunda mitad. En ese segmento, fueron los ciclistas de equipos chicos quienes tuvieron sus 30 segundos de gloria al transitar algunos metros en solitario.

La carrera, propiamente dicha, comenzó luego del incidente con un automovilista (ver página 15) que provocó la rodada de Diego Villarruel y la protesta de todos los ciclistas.

Los últimos 60 kilómetros fueron de palo y palo, los pasistas trataron de romper piernas para seleccionar un grupo que llegó compacto al final y puso frente a frente a los más rápidos, entre los que se destacó el matador catamarqueño.