El cross y el rural son las dos especialidades del ciclismo de montaña que menos gente convocaban en sus citas. Habituados, por formación y convicción en el rally, los bikers elegían las carreras largas. Esas que durante 2009 y 2010, llegaron a superar en cantidad de inscriptos los 500 ciclistas en pruebas clásicas como La Nikizanga y que sufrieron un marcado descenso de participantes los años posteriores, especialmente en 2012.
Influyeron varias cosas. Al decir de los bikers se cansaron de los mismos circuitos y el entusiasmo entró en un freezer. Hubo carreras, como la Vuelta de San Juan que crecieron, posiblemente por la novedad de que unificaba en tramos cortos las tres variantes y otras que entraron en una meseta que generó desinterés por parte de quienes competían en ellas y también de quienes las organizaban.
Otro de los puntos que incidieron fue el económico. La falta de materiales, y bicicletas, por las restricciones aduaneras a la importación y el valor de los mismos, sumados a los gastos que deben afrontar los corredores cada vez que tienen que participar en alguna competencia fuera del Gran San Juan, fueron reduciendo el pelotón.
Dentro de ese panorama hay organizadores que decidieron “aggiornarse” a los tiempos que corren y, pensando en quienes dan vida a sus carreras, realizaron modificaciones. La gente de Ecoaventura San Juan, notó que la Expedition del año pasado, con 100 kilómetros, significó una experiencia muy dura y para el 30 de enero están promocionando una prueba de 60 kilómetros por un circuito nuevo en las pintorescas zonas de Rivadavia y Zonda (30 Km para los promocionales).
En Adventure Pro notaron que la crono escalada en Pocito suponía un gran esfuerzo y diagramó una menos dura en la zona de Ullum. La tercera edición de la Vuelta comenzará el viernes 24 con un Short Track que a diferencia de los años anteriores no tendrá influencia en la clasificación general y si repartirá buenos premios.
El calendario armado por las empresas promotoras y la Asociación Sanjuanina de Ciclistas de Mountain Bike (ASCMTB), apoyado por el Ministerio de Turismo de la provincia incluye competencias de las tres especialidades y tiene en sus fechas puntuables las tres competencias ya citadas y el Campeonato Argentino, que debe organizar el 16 de junio, el Andes MTB.
El cross (XCO) organizado por el Huarpes en Punta Tabasco el mismo día que se corría en Córdoba el Desafío del Río Pinto, contó con varios bikers que en años anteriores iban a correr la clásica nacional. Lograr que 160 pedalistas larguen marcó un éxito de convocatoria.
En tanto que, aún saliendo con apuro para tapar el hueco que dejaba la suspensión de “La Nikizanga”, la gente de la ACR y la ASCMTB, consiguieron seducir con la propuesta a la troupe biker y contaron con 315 inscriptos que, en su gran mayoría, coincidieron en las bondades del trazado elegido, que combinó rally y rural.
Grande es la expectativa de los integrantes de Kuntur y Ecoaventura que ya cuentan con 300 inscriptos para la séptima edición del Desafío Ischigualasto que se disputará el sábado 14 de septiembre.
Posiblemente la Copa SRAM reduzca de cuatro a tres sus carreras, porque está en duda la fecha del 9 de junio. La cercanía con la Vuelta es uno de los motivos por los que la fecha, fuera de torneo provincial, podría levantarse.
Quienes quieran inscribirse para las carreras pueden hacerlo mediante las páginas de Internet (www.adventurepro.com.ar y www.ecoaventurasanjuan.com.ar). La empresa organizadora de la Expedition Race anuncia en su sitio oficial un curioso sistema de sorteo de una inscripción. El biker debe filmarse con su teléfono celular diciendo: “soy (nombre) y voy a correr el Expedition Bike”. El primero que lo haya subido, ganó una remera alusiva.
No sería serio pronosticar posibles cantidades de inscriptos para las competencias que vienen, pero el renovado crecimiento del interés biker genera una postura interesante y optimista mirando al futuro.