El seleccionado argentino de vóleibol masculino, que tiene como capitán al sanjuanino Rodrigo Quiroga y como opuesto titular a Federico Pereyra, consiguió anoche su pasaje para los Juegos Olímpicos de Londres 2012 tras doblegar por 3 sets a 0 a Venezuela, en la final del Preolímpico que se desarrolló en el Polideportivo de Almirante Brown. El equipo dirigido por Javier Weber se impuso con parciales de 25-19, 25-19 y 27-25, en un partido que duró una hora y 27 minutos.
La Argentina se tomó de este modo revancha de la final que ganara Venezuela en el Preolímpico que se realizó en 2008 en Formosa, el cual privó al representativo albiceleste de estar en los Juegos de Beijing. Esta clasificación le permitió al seleccionado masculino estar presente en su sexto juego olímpico.
Hasta el segundo tiempo técnico (16-13) a la Argentina el partido se le hizo cuesta arriba, ya que, con serios problemas en la recepción, el equipo dirigido por Javier Weber no logró construir juego, lo cual provocó que ni Facundo Conte ni Federico Pereyra consiguieran pegar con comodidad cada vez que quedaban frente a la red. A pesar de todo eso, el camino del 25-19 con que terminó el primer set no fue para nada sencillo.
El segundo set también estuvo marcado por la irregularidad del conjunto albiceleste, que comenzó con gran solidez para sacar ventaja de 5-1 y mantuvo esa tendencia hasta el primer tiempo técnico (8-4), pero a partir de ese momento aparecieron los mismos problemas que en el primer parcial.
Hubo dificultades en el armado del juego, y el bloqueo se mostró un poco permeable a los ataques venezolanos. Pero en los últimos puntos el seleccionado comenzó a hacer sentir la potencia de los remates de Conte, Pereyra y Rodrigo Quiroga y cerró el segundo parcial por 25-19.
El último set, que todos esperaban fuera el definitivo, resultó también el más crítico. Tras un arranque favorable de 6-2, los dirigidos por Weber ingresaron una seguidilla de errores. Al equipo pareció que se le venía la noche cuando quedó 13-14, sin embargo el juego se definió por una sencilla razón: Argentina hizo valer la calidad individual de sus jugadores en el cierre mismo, aunque hubo que esperar hasta el segundo mach point la ansiada clasificación a Londres.

