Banfield venció ayer por 2-0 a Lanús en el clásico del Sur bonaerense de la 4ta. fecha del Clausura.
El desarrollo fue favorable a Banfield, de principio a fin. Más allá de que durante los 45 minutos iniciales no tuvo el control mayoritario de la pelota, el elenco local dominó porque maniató a su rival y lo redujo a un "fulbito" casi intrascendente.
Lanús opuso un esquema mezquino, con un Guido Pizarro que se movió por derecha con la estricta misión de trabajar en la recuperación del balón.
Sin embargo, a los orientados por Luis Zubeldía les costó muchísimo generar peligro y poner cara a cara con el arquero rival a sus delanteros. Tanto que Diego Lagos como Castillejos parecieron deambular por el área contraria y casi no tuvieron contacto con la pelota.
A todo ésto, Banfield esperó su momento. Y en el segundo tiempo arrinconó a su rival, a partir de lo que empezaron a jugar Battión y Erviti.
Sobre los 14 minutos, después de un tiro cruzado de López, apareció Battión para empujar un rebote que dejó corto el arquero Marchesín y decretó la apertura del tanteador.
Con la ventaja a su favor, Banfield jugó con la desesperación del rival, que se enloqueció y quedó con dos jugadores menos.
La parcialidad albiverde gozaba con la victoria pero faltaba la "cereza del postre", que llegó a los 48 minutos. El colombiano Rodríguez metió una definición excelsa para festejar el segundo tanto.