Como en la perinola, Ricardo Escuela “toma todo”, no deja nada. Todas las frutas maduras de cada etapa han sido para él. No le dejó ni una pintona para Laureano Rosas, su rival más cercano contra quien deberá defender la malla de líder, en la contrarreloj individual que se desarrollará por la Avenida de Circunvalación.
El ciclista barrealino, que primero declaraba que estaba muy bien entrenado y a medida que pasan las etapas fue afirmando su discurso en que quiere ganar la Vuelta, está haciendo todo bien. Ayudado de manera impecable por su equipo que, primero, no permite que se vaya nadie del pelotón y luego, lo lleva en “sillita de oro” hasta el velódromo, lugar donde Escuela se transforma en un monstruo ávido de gloria que hace trizas las expectativas de sus adversarios.
El parcial de ayer que recorrió San Martín, tocó Caucete y pasó por Albardón, Angaco y Chimbas, tuvo un inicio complicado. El equipo continental brasileño Ironage Colner, largó y abandonó a los pocos metros en protesta por la expulsión de su capitán, Edgardo Simon (ver página 52). Hasta los 50 kilómetros pasó poco y nada. Algunos ataques esporádicos que tuvieron poca vida porque los municipales pocitanos apretaban el ritmo en la cabeza del pelotón y el enjambre multicolor engullía a los osados que, con casi 45 grados de temperatura, intentaban escaparse.
Recién a los 50 kilómetros de recorrido se produjo una incidencia que marcó el rumbo de la etapa. Dos hombres de la Agrupación Virgen de Fátima, Daniel Zamora (ubicado a 1m29s), Luciano Montivero y el riojano Federico López (Municipalidad de Guaymallén) sacaron 45 segundos y se quedaron con todos los embalajes intermedios. La diferencia se mantuvo estable hasta los 110 kilómetros, cuando los compañeros de Escuela y la gente del Sindicato Empleados Públicos, con Laureano Rosas a la cabeza, decidieron que al velódromo llegarían todos juntos.
Las huestes piqueteras, sabiendo que la única manera de tener chances de pelear la carrera, intentaron llegar con algún ciclista cortado. Fue Juan Pablo Dotti (ubicado a 56s) quien atacó, acompañado de Franco López, pero ya se transitaba por Avenida Rawson (al Sur) buscando la avenida de Circunvalación y, por obra y gracia de los municipales pocitanos la suerte estaba echada. Habría embalaje masivo.
Al velódromo entró de cabeza Diego Tivani, Nicolás Naranjo lo superó en la mitad del peralte Norte. El joven ciclista que fue el primer líder de esta Vuelta, pisó la recta de cabeza y atrás, con el cuchillo entre los dientes apareció Escuela, para rebasarlo antes de la línea y sumar otros 10 segundos de bonificación que cotizan en bolsa.