El Gran Premio de Canadá de Fórmula 1 entregó emoción desde el comienzo. Cuando recién arrancaba la competencia, un accidente paralizó el aliento de los espectadores.

En la primera vuelta de competencia, el neozelandés Brendon Hartley (Toro Rosso) y el local Lance Stroll (Williams) peleaban arduamente su posición. Tanto, que todo decantó en un accidente.

Cuando Hartley trataba de ganarle el lugar, Stroll no cedió y el toque fue inevitable. Por el impacto, el Toro Rosso del neozelandés voló por el aire y Stroll terminó contra un costado. Para ambos, la carrera se terminó demasiado pronto.

Luego del accidente, tanto Stroll como Hartley recibieron atención médica en el mismo circuito, pero tras esos primeros cuidados se determinó que el neozelandés fuera derivado al hospital para una revisión más precisa.