Está feliz. Tranquilo. Se le nota sólo con escuchar su voz. Claudio "Chiqui" Tapia, el presidente de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA) habló de todo con DIARIO DE CUYO en una entrevista exclusiva. De frente, como lo hace. Contestando todo y ampliando sus respuestas. El sanjuanino, que dijo que la provincia donde nació es su lugar en el mundo, se refirió en su mayoría a la Copa América recién finalizada. Al logro de ganarla. También a los proyectos que tiene para el fútbol argentino. Habló además de Messi, Scaloni, Gallardo, de su antecesor Grondona...

- Ya pasaron algunos días de la obtención de la Copa América, ¿qué balance hace?
- Ya más tranquilo. Viviendo ahora lo que en un momento no se pudo vivir por la carga emocional y los nervios de jugar una final. Disfrutándolo. Lo mejor de todo es haber podido empezar a plasmar un proyecto con la obtención de un título después de 28 años. Que sin dudas por cómo se dio, ganarle el título a Brasil en el mismo Maracaná, magnificó todo. Brasil nunca había perdido una Copa América jugando de local. Es más: hacía 80 partidos que no perdía. Al proyecto deportivo siempre se lo mide por los logros deportivos. Y este título, que no es uno más. Es ganado con el mejor jugador del mundo, quien nos ha dado muchísimo. Por ahí los resultados deportivos no se daban antes y Messi fue muy atacado por muchos porque no había podido ganar un título. Eso es historia.


Todo se inició hace tres años con un proyecto de Selecciones del 2018 al 2028. Ahora estamos en una etapa de consolidación de este proyecto, con una base de recambio importante, donde han jugado chicos que por ahí no eran ni conocidos por algunos y lo han hecho de la mejor manera.


Fue un esfuerzo en conjunto porque no era fácil tener una convivencia de tantos días. Eran Eliminatorias más Copa América donde participan los empleados, cocineros, cuerpos médicos, administrativos y colaboradores que acompañaron a la Selección durante 55 días. La única Selección que realmente cumplió con la burbuja. Iba y venía durante el torneo. Eso también fue una parte importante porque el predio de Ezeiza fue armado con todas las condiciones para poder llevar adelante la competencia. Fueron casi más de 2.400 hisopados entre toda la delegación. Siempre uno mira el resultado deportivo pero a nivel proyecto más importante lo que se pudo ver: una Argentina que fue de menor a mayor, que ganó la final y punto. Porque las finales se ganan, no se juegan. Hubo un esfuerzo enorme con jugadores para tirarse de cabeza, correr a los rivales 30 o 40 metros. Yo digo que es muy positivo ver a un grupo donde están todos concentrados. Así se ganan los torneos.

- Cuando este proyecto comenzó, (el DT) Scaloni era de los más criticados por su corta experiencia, ¿qué espera de esos críticos ahora después del campeonato?
- La verdad que nosotros, por lo menos en lo personal, no esperamos nada. Siempre uno es de trabajar convencido de lo que organiza.


Para el proyecto que estamos desarrollando necesitamos la estructura que AFA tiene, que no creo que ninguna federación a nivel mundial tenga. Y cuando hablo de estructura hablo de todas las selecciones, porque uno ve la Mayor pero por ahí no analiza juveniles, femenino, fútbol playa, el futsal femenino y masculino, y en todas hemos logrado títulos deportivos. Ese es el verdadero proyecto, donde tenemos una cabeza como director general de Selecciones Nacionales como (César Luis) Menotti, donde hay un deporte de metodología que está a cargo de Javier Mascherano y el profe (Pablo) Blanco -que han estado mucho tiempo con Sabella-, donde no hay federación que tenga a Bernardo Romeo, Diego Placente, Aimar, como plantel de trabajo. Cuando nosotros asumimos, de 16 selecciones teníamos cuatro que estaban con su cuerpo técnico trabajando contratados según la urgencia deportiva. Hoy hay 16 selecciones trabajando este proyecto. Como decía al principio, eso es convencimiento. Hay que estar tranquilo y no detenerse en lo que puedan decir los críticos.


Scaloni tenía la antigüedad necesaria porque ya venía de dos años dentro de un cuerpo técnico que estaba dentro de la Selección mayor. No creo que no haya tenido experiencia, como algunos decían. En su momento quizás fue una decisión difícil pero hoy estamos tranquilos y más confiados que nunca, porque esta Selección no ha llegado a su techo.


- ¿Cree que el techo es el Mundial de Catar 2022?
- Ojalá... Primero hay que clasificar y después tener un buen mundial. Sin dudas que con la confianza y consolidando este proyecto, porque no deja de ser un proyecto, han jugado muchos chicos en esta copa que han sido titulares y no habían jugado nunca en la Selección y eso te da tranquilidad. Ganar un mundial es una posibilidad importante, tanto de consolidación de este proyecto, de este grupo y de este cuerpo técnico.

- Recién dijo que los jugadores habían mostrado una actitud importante en todos los partidos ¿nota también un mayor compromiso por parte de Messi?
- Yo creo que Leo siempre tuvo el mismo compromiso porque siempre estuvo presente, porque siempre quiso que nuestra Selección vaya de la mejor manera, siempre dio lo máximo. Ese es el compromiso, durante tantos años de venir y hacerse responsable de la Selección. Quizás ese fue nuestro error, decir que era la Selección de Messi. No entender que el fútbol es un juego colectivo en el que ganan los equipos y donde todos tienen que poner lo mejor de sí. De nada te sirve tener al mejor jugador del mundo si entre todos no interpretan lo que quiere el técnico. Este grupo interpretó que Messi se merecía lograr un título y que para eso tenían que jugarse la vida. Esta copa tiene ese doble valor: el título y que Leo (Messi) la haya podido disfrutar. Que le hayamos podido devolver parte de lo que él le dio a la Selección durante todo este tiempo.


- ¿Que fue lo que más le gustó en cuanto al juego de la Selección?
- A mí me gustó todo.

- Claro, lo dice porque Argentina ganó el título...
- (Risas) Nosotros tuvimos situaciones que por ahí otras selecciones no tuvieron. Muchos jugadores venían de jugar setenta partidos en Europa. Nuestra selección casi no había tenido competencia porque las Eliminatorias se jugaron mucho menos que en Europa porque no teníamos fecha FIFA por la pandemia. Los técnicos nuestros no han tenido la posibilidad de tener los jugadores como quizás tuvieron otros. Vos fijate que de los 28 jugadores solamente dos o tres estaban en el fútbol argentino, dos de ellos venían de pasar el covid, o sea que cuando los recibió el técnico tampoco estaban con el ritmo del fútbol que uno necesita para la alta competencia en la Selección argentina.

-Si Argentina clasifica al Mundial, ¿habrá un programa especial para que los jugadores tengan más tiempo para entrenar?
-Creo que por la pandemia es muy difícil de poder tener esperanzas auspiciosas sobre eso. Ahora estamos pensando en una fecha de Eliminatorias triple en septiembre y en octubre, donde la exigencia va a ser mayor y se le ha pedido a FIFA la posibilidad de tener dos días más para que los jugadores puedan rendir un poco más.

"Somos muy agradecidos de Alejandro Domínguez que en el momento más difícil tomó la decisión que la Copa América se debía jugar sí o sí".

- Miadosqui dijo hace unos días que San Juan tenía la chance de tener una fecha de esa triple como sede, ¿es concreto eso y qué fecha sería?
- San Juan es una provincia que siempre acompañó a todas las selecciones. No sólo a las mayores, sino en las diferentes actividades. Hemos hecho muchísimos eventos en San Juan. Se nos ha dado la chance de que todas las selecciones jueguen ahí y sabemos el compromiso que tienen con el deporte y el compromiso que tiene el Gobernador como política de Estado y lo que representa a nivel nacional y sudamericano. Eso tiene muchísimo valor y por eso tenemos la mejor de las predisposiciones para con San Juan. Nosotros teníamos previsto que alguna de las fechas se juegue ahí, una vez que FIFA defina porque realmente no sabemos si vamos a tener dos o tres días más que es lo que se ha planteado para las Eliminatorias. Recién ahí nos sentaremos para definir. Pero sí, sin dudas que sí, a uno le gustaría que una de las fechas se juegue en San Juan.
 
-Volviendo a la Copa América: ¿no se puso a pensar que se podría haber jugado en Argentina y tener el mismo resultado?
- La verdad que en la vida las cosas suceden por algo. Dios o el destino estableció que jugáramos en Brasil. Fijate el valor que tiene por todo lo que te decía antes, después de 28 años lograr un título en Brasil, 80 partidos que no perdían en el Maracaná, la primera copa que son sede y no ganan, el primer título para el mejor jugador del mundo ahí, final contra Brasil. La verdad que en lo primero que uno piensa es en la sanidad de todos los argentinos que era lo más importante, nosotros estamos viviendo un momento sanitario difícil. Y jugarla allá salió a la perfección.


-¿Se imaginó alguna vez todo esto? ¿Estar como presidente de AFA y que Argentina vaya y le gane a Brasil en el Maracaná?
- Quizás uno siempre soñó que las cosas se dieran así. Antes de jugar la copa pensaba una final contra Brasil y ganarla. Pero no sabíamos que iba a ser ahí, en Brasil. Esto fue consecuencia de dónde jugamos pero acá nosotros somos muy agradecidos de Alejandro Domínguez que en el peor momento o en el más difícil de todos tomó la decisión de que la Copa América se debía jugar sí o sí. Rápidamente encontró una sede y una organización. En once días es muy difícil albergar a diez Selecciones, buscar los campos de entrenamientos, los campos de juego en condiciones, las medidas sanitarias para que se pueda realizar la copa.


- Lo hemos visto bastante seguido por San Juan. ¿Nació y se crió acá?
- Sí, hace 53 años que nací ahí. En Concepción. En una esquina entre calles Falucho y Catamarca. Pero después me fui a vivir a Buenos Aires.

- ¿Cuándo se fue de San Juan?
-Muy chico. Tenía cuatro años. Pero después volví a los ocho y estuve hasta los once. Y después me tocó ir durante todos los años de vacaciones. De grande también. Cuando mi hermana se radicó en San Juan, iba por sus cumpleaños. O a los aniversarios de muerte de mi papá, que me pidió que cuando falleciera llevara los restos a San Juan. En realidad, en el año, estoy ahí siete u ocho veces. Quizás ahora menos por el tema sanitario pero siempre voy a San Juan. Es mi lugar en el mundo.

"A medida que vaya avanzando la vacunación y que epidemiológicamente mejoremos hay más chances de que el público vuelva a las canchas".

- Cuando era niño o adolescente, ¿era de ir a la cancha?
- Sí, sí, lo hablaba con Miadosqui, he ido muchas veces a la pileta de San Martín, a los bailes de carnavales a Ausonia, siempre iba algún partido y a disfrutar porque era parte de las vacaciones y de lo que uno también le gustaba hacer.

- Pero no se puede decir que era hincha de San Martín, ¿o sí?
- (Risas) La verdad que soy hincha de todos los equipos del fútbol argentino, como sanjuanino uno quiere que le vaya bien al fútbol sanjuanino que recuperen la representatividad en la Liga Profesional que eso sería importante para la provincia, pero la verdad es que siempre que voy a San Juan lo veo bien, puedo disfrutar, veo que la gente está bien en la provincia, veo cosas que a uno lo alientan y lo sé por mi familia porque ellos siguen ahí.

- ¿Mantiene contacto con la Liga Sanjuanina de Fútbol? ¿Con Cuevas, su presidente? ¿Sabe cómo está la Liga? ¿Sus problemas?
- Sí, sí, hablo mucho con Cuevas y sé cuáles son los problemas. Él me llama siempre y me consulta. Si no lo hablo con Jorge (Miadosqui) o con Chica (Jorge) mismo. Siempre estamos viendo en qué podemos acompañarlos o ayudar. Y eso es con todas las ligas. El Torneo Federal es muy representativo. Se han hecho modificaciones importantes en todo el fútbol del interior. Y el Consejo Federal a la cabeza de Toviggino viene haciendo cambios profundos que son importantes. Se le ha dado más protagonismo a las ligas. Antes en los torneos federales había 600 equipos y terminaban ascendiendo sólo dos. Se desangraban en desmedro de las instituciones y del fútbol local porque todos querían ascender. Hoy está cambiando y se prioriza el fútbol local.


- Se especula con que pronto pueda volver el público a los estadios. ¿Qué puede decir de eso?
-Todos sabemos lo que representa el público en las canchas. Nos ha tocado jugar en Eliminatorias con Colombia y tenían 10.000 hinchas. No sólo por la presencia sino también por los ingresos. A medida que vaya avanzando la vacunación y que epidemiológicamente vayamos mejorando hay más chances que el público vuelva a las canchas. A mí no me gusta poner fechas porque son medidas que se toman en forma sanitaria.

- Recién dijo que tiene contacto con Cuevas, también con Chica, y sabemos de su amistad con el gobernador Uñac. ¿Lo ve con algunas chances a Uñac de pegar un salto político?
-Yo a Sergio lo quiero mucho y sé lo que representa como gobernador. Es un amigo, trato de no hablar de política o de no meterme. Creo que la política mía es la deportiva para que los clubes sigan creciendo y mejoren. En eso tengo que preocuparme.

- Gallardo dijo hace poco que le gustaría ser técnico de la Selección, ¿qué opinión le merece?
-Yo creo que a cualquier técnico que le pregunten su sueño debe ser dirigir a la Selección y al mejor jugador del mundo. Y está bien que todos tengan ese sueño y sientan lo mismo para la Selección. Esto es así. Es como que a cualquier dirigente le pregunten "¿a vos te gustaría ser presidente de la AFA?". Dirían sin duda que sí. Cuando uno es dirigente quiere lo mejor y sueña con ocupar el cargo máximo. Alguien que por vocación se dedica a eso tiene el mismo sueño.

- Pero Gallardo lo dijo en plena Copa América. Y de paso antes ya le tiró a usted otros tiritos...
-La verdad es que yo no me fijo en esas cosas. Yo lo miro del lado de que uno siempre quiere lo mejor. De que todos los argentinos querían que a la Selección le fuese bien. Nosotros sentíamos esa energía que generó la Selección dentro del campo de juego para afuera porque lo vivíamos, porque veíamos las redes y nos daba mucha fuerzas ver a los argentinos en los balcones. Y cuando jugamos con Colombia y ganamos ver a la gente festejando a las 12 de la noche. A los bocinazos, a su manera. Yo creo que eso es lo importante.

-¿Cuál es su opinión de su antecesor Julio Humberto Grondona?
-La verdad que yo viví mucho la conducción de Julio. Él hizo cosas muy positivas para el fútbol argentino, se lograron dos títulos mundiales bajo su presidencia, que es el logro más importante que puede tener cualquier federación. Con la pérdida de él fue el peor momento del fútbol argentino. Falleció Grondona y la dirigencia no estaba preparada para asumir un cambio dirigencial tan pero tan grande y representativo. Nos tocó lo peor porque lo que antes decía, de 16 selecciones cuatro desempeñando un proyecto donde los técnicos eran elegidos según la urgencia deportiva. Donde había deudas impresionantes, porque los torneos no empezaban nunca en fecha porque se le adeudaba a los técnicos y a los jugadores. Había clubes que estaban endeudados. Las dos presidencias siguientes no pudieron encontrar el rumbo necesario. A nosotros nos tocó conducir una AFA con muchísimas deudas, con más de 21 millones entre dólares y euros a dueños de derechos de televisión, con más de 120 millones de pesos de deudas a los clubes argentinos por derechos de participación en distintas competencias. Con más de 400 juicios y deudas a proveedores por más de 90 millones de pesos. Y no nos olvidemos de las deudas de penas tributarias que tuvieron las conducciones anteriores, tanto la de Luis Segura como la de Armando Pérez que también afrontamos nosotros todos esos pagos.

- ¿Y hoy cómo está la AFA?
- En la actualidad tenemos una economía saludable donde se han hecho entre 22 y 23 obras en el predio. Donde se ha modernizado y se ha puesto un predio al nivel máximo que tiene que tener nuestra Selección. En la sede de Viamonte se han hecho muchísimas obras para modernizar y tener la estructura necesaria que se merece el fútbol porque hoy todo ha cambiado. Es una estructura mucho más profesional. Todo eso lo hemos hecho nosotros en apenas cuatro años y medio. Estamos en un edificio con una sala Var-work que somos la única federación que lo tiene además de la Conmebol. Estamos finalizando las obras del edificio de Ezeiza. Cuando asumimos, el fútbol femenino no tenía ni utilería y hoy tienen vestuarios y utilería. Vamos a seguir trabajando. Por ahí muchos no se acuerdan en qué situación estaba la AFA y el fútbol argentino cuando nos tocó asumir.