No era "la" final del torneo. Pero en Concepción se vivió así. El regreso de San Martín a Primera División se selló anoche, con un encuentro que estuvo marcado por la polémica. Si bien el Verdinegro ya había disputado un par de partidos en el Pueblo Viejo, la llegada de Boca Juniors, uno de los "grandes" del país, le dio el toque que necesitaba el Verdinegro para concretar ese regreso a la máxima categoría del fútbol argentino. Y lo demostraron los 18 mil hinchas que se hicieron presentes en Concepción para vivir ese encuentro y plasmar una fiesta en las tribunas donde nadie quiso estar ausente.
Si bien el estadio no estuvo repleto en su totalidad, las plateas Oeste y Este lucieron colmadas, mientras que la popular de las 8 mil almas mostró algunos blancos y la cabecera Sur, tampoco se mostró como en encuentros anteriores.
Lo cierto es que el choque de anoche entre San Martín y Boca fue vivido como una final. El equipo "sensación" del torneo (aunque en la cancha no lo demostró) llegó a Concepción y paralizó por unas cuantas horas la provincia. En todos los ámbitos. Desde el sábado mismo, con el arribo del Xeneize, San Juan se vio desbordada por la presencia de uno de los equipos más populares del país, que por una disposición de la dirigencia de San Martín no pudo tener el apoyo de su gente ya que sólo estuvo permitido el ingreso para hinchas locales. Medida que no fue respetada del todo, y quedó reflejada cuando en el gol de Boca (marcado por Osvaldo) varios hinchas infiltrados de Boca en la platea local no pudieron contenerse y gritaron el gol, lo que motivó furia en los hinchas de San Martín.
Eso tampoco empañó la fiesta. Basta con destacar que faltando más de tres horas para el inicio del encuentro los hinchas verdinegros ya habían comenzado a copar las tribunas del estadio "Hilario Sánchez". Y nada que decir cuando los equipos salieron a la cancha hacer trabajos precompetitivos. Ahí bajó la primera ovación de la noche, lógicamente para el Verdinegro. El público continuaba haciendo su ingreso a la cancha buscando su mejor ubicación y en las plateas resultaba casi imposible poder encontrar un rinconcito donde ubicarse.
"Que esta noche cueste lo que cueste, esta noche tenemos que ganar…", retumbó fuerte cuando los equipos hicieron su ingreso al campo de juego. Desde la popular Norte, la "Banda del Pueblo Viejo" desplegó su trapo que cubrió toda la cabecera, mientras en las plateas comenzaban a aparecer miles de celulares para fotografiar ese momento.
En los palcos se notó la presencia de muchas personalidades como la del gobernador José Luis Gioja, el vice Sergio Uñac y hasta el gobernador de La Rioja, Luis Beder Herrera. Pero no sólo hubo figuras de ese ámbito, también se hicieron presentes personalidades del deporte sanjuanino como Leonel Natalicchio, jugador de Unión, el doctor Santiago Prieto, el director técnico mendocino Mauricio Magistretti, hasta figuras de otros ámbitos deportivos, como el presidente del Club Julio Mocoroa, Roberto Sosa, o el reconocido experimentado Osvaldo Webhe, quien llegó para llevar las alternativas del encuentro para todo el país por Cadena 3.
Todos, los 18 mil presentes, vivieron el encuentro con las pulsaciones a mil. Criticaron cada fallo arbitral del polémico Patricio Loustau, gritaron, se abrazaron y otros, hasta lloraron con el gol del uruguayo Carlos Bueno, se enfurecieron con la actitud de Agustín Orión y aplaudieron a más no poder la salida del goleador. En lo que duró el encuentro, los fanáticos experimentaron una mezcla de sensaciones y sentimientos que sólo el que entiende de fútbol puede encontrar explicación. Al fin y al cabo, fuera del resultado, todos vivieron su fiesta. Concepción volvió a sentirse de Primera.

