La semana próxima, los nadadores sanjuaninos, Valentín (24) y Felipe Vargas (22), partirán a Francia, donde iniciarán un periodo de entrenamientos en el club Canet-Natation, ubicado en la ciudad de Canet-en-Rousillon, en la provincia de Perpignan, al sur de la nación gala.

La idea es permanecer cuatro meses compartiendo las prácticas con los nadadores de dicha institución que ha provisto y provee de valores de nivel internacional a la natación francesa. 
En el Canet-Natation se realiza, anualmente, una fecha del Torneo Mare Nostrum, que se completa con competencias en Mónaco y Barcelona, a las que acuden muchos de los mejores nadadores del ranking mundial.

Los hermanos Vargas tienen como meta final lograr la clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y la primera escala del ciclo olímpico comenzará el mes próximo en Francia. ‘Sabemos que la preparación será muy intensa, con jornadas de entrenamiento de dobles y triples turnos de natación y gimnasio’, confió Felipe.

Valentín, por su parte, explicó que desde ‘enero’ han ido preparandose para llegar lo más ‘afilados’ posible a la cita en Francia. ‘Con Silvia (Maldonado, su entrenadora) hemos realizado una tarea muy intensa, también con jornadas de triple turno con el fin de llegar con buena base física a Canet’.

Coincidieron que esta oportunidad llega en un momento justo de maduración y que competir en el más alto nivel mundial es un ‘sueño’ compartido.

La falta, en San Juan, de una pileta cubierta con medidas olímpicas (de 50 metros de extensión) es una de las ventajas que otorgan los multicampeones sanjuaninos cuando deben acudir a las diferentes competencias.

La prioridad es bajar sus marcas personales en los 200 metros espalda; algo que lograrán solamente, compitiendo con los mejores del mundo.