-¿Dónde estuvo la clave de la victoria?
-En la tarea en conjunto que realizamos durante toda la carrera. Salimos con un plan definido y pudimos llevarlo a cabo durante toda la carrera. Al igual que la semana pasada mis compañeros trabajaron para mí y por fortuna pude responderles como esperaban.
-¿La táctica era atacar soltando gente para romper piernas?
-La idea era mantenernos siempre atentos para evitar cualquier sorpresa y si todo marchaba sin complicaciones, sí, salir a tratar de desgastar a los rivales. Se dio como se pensó, aunque no siempre ocurre así. Después era apostar todo al embalaje masivo.
-¿Cómo armaron el embalaje?
-Cuando doblamos para la recta donde estaba la meta yo le marqué la rueda a Escuela. Sabía que si no la perdía en el final podía intentar el ataque. Por fortuna se dio y estoy muy feliz de ganar este circuito otra vez (NdR: es la cuarta ocasión en la que se impone).
-¿Es cierto que si tiene que elegir una carrera esa es la Calingasta?
-Siempre es lindo ganar las clásicas y si es la Calingasta, una con tanta historia, mejor. Pero no. Yo trabajo para ganar siempre. Carreras son carreras, cuando uno mejor está a veces no gana y cuando uno no espera quedarse con un triunfo se da. Lo importante es que el equipo crece a diario y que eso nos permite a todos entrenar con más motivación.

