Buenos Aires, 8 de septiembre.-El tandilense Juan Martín Del
Potro superó hoy al español Juan Carlos Ferrero por un triple 6-3 y se metió por segunda vez consecutiva en los cuartos de final del
Abierto de Estados Unidos, cuarto y último Grand Slam del año.
En el cemento del estadio Louis Armstrong, Del Potro, quinto
en el ránking de la ATP, hizo gala de un servicio implacable para
salir de las escasas situaciones de juego complicadas que enfrentó
y de una potente e incisiva derecha para doblegar finalmente al
español, ex número 1 del mundo y actual 25 de ese escalafón, en 2
horas y 8 minutos de juego.
En la siguiente instancia, la "torre" tandilense se medirá con
el croata Marin Cilic (17), quien hoy superó al escocés Andy
Murray (2), uno de los grandes candidatos al título, por 7-5, 6-2 y
6-2.
La seguridad de Del Potro, sobre todo con su saque con el que
consiguió 22 aces, contrastó con los momentos dubitativos que tuvo
el español al momento de aprovechar las pocas situaciones
favorables con las que contó, como los cuatro puntos de quiebre que
desperdició por falencias propias y por el oportunismo del tandilense
para sacar a relucir sus virtudes.
Fue sólido Del Potro en la primera manga y exhibió un primer
saque por demás contundente (8 aces) que no le otorgó al español
ninguna chance para doblegarlo.
En el octavo game, Del Potro aprovechó el primer momento de
duda de Ferrero con su saque para quedar 5-3 arriba y apoderarse
luego del set inicial con su servicio, en 35 minutos de juego.
Un poco más parejo en su inicio fue el segundo parcial, en el
cual Ferrero pareció encontrarle la vuelta al saque del
tandilense, aunque sólo se trató de buenas intenciones porque el número 6 del mundo reaccionó ante un doble punto de quiebre en contra en el cuarto game y no sólo salió ileso de esa instancia sino que comenzó su levantada.
En el juego siguiente se apoderó del servicio del español y se
encaminó hacia una victoria en la manga que quedó sellada con un
nuevo rompimiento en el game final.
El último parcial continuó con la misma tendencia, es decir,
con Del Potro a puro palazo desde el servicio y desde el fondo de
la cancha, y con un Ferrero que se esforzó al máximo pero no pudo
ante la concentración demostrada por el argetino en momentos
claves.
De esta manera, el tandilense quebró en el octavo juego luego
de dos intentos frustrados en el quinto y cerró a puro palazo el
juego definitivo para vencer por primera vez al español, con el que
se había enfrentado dos veces en polvo de ladrillo en 2006, y
ganarse por segunda vez en forma consecutiva el pase a los cuartos de final del último Grand Slam del año.
