La semana previa del partido ante Luján los jugadores de Trinidad, Leonardo Fernández y Ernesto Ceballos fueron desvinculados por diversos motivos. Fernández después del hecho dijo que vivían en malas condiciones. Ceballos no habló.
Respecto al tema, el delantero Germán Gigena, que compartía el departamento con ambos futbolistas (ahora vive solo junto a su mujer), coincidió en que "pasábamos calor, porque había sólo un aire en una pieza. Además la comida era muy poca al igual que la mercadería. Eso sí, estábamos al día en el sueldo".
La dirigencia del León, molesta con las declaraciones de Fernández, dijo que le llevaban la comida a domicilio y que se levantaban muy tarde porque salían mucho de noche. El Gato (por Gigena) dio su visión de ese tema diciendo que "soy profesional y se que me tengo que cuidar. A veces salíamos un rato de noche, pero nos acostábamos temprano". Luego agregó que el almuerzo era muy poco para quedar satisfecho. "Nos daban un menú con una milanesa y ensalada de lechuga, nada más. Además el bolsón de mercadería era chico". Pero dejó bien en claro, que "nunca tuve problemas con el dinero, no me sobra, pero tampoco me falta".
Hoy Germán vive con su mujer y su hijo a pocas cuadras del club. En ese departamento añadió que está "muy cómodo, no tengo aire pero sí un ventilador a pie". Así de sinceras y claras fueron las declaraciones de Germán Gigena que vivió en carne propia la situación.
