"Y bueno... vamos a dar una vuelta por el circuito". El gobernador, José Luis Gioja, llegó ayer al puente Albardón-Chimbas "demasiado" temprano para bajarle la bandera a la primera moto que finalizó la etapa. El mandatario arribó a la zona pasadas las 13 y por eso debió amenizar la vigilia de más de una hora con una vuelta en una 4x4 por los caminos que recorrerían los pilotos. Después de ese paseo, Gioja se dio tiempo para charlar bajo el puente con los Sisterna, quienes estaban ahí en el rol de espectadores. Buena parte de la espera la realizó con comentarios como "por suerte todo esto es un éxito" o "qué calor que hace". En algún momento se lo notó un poco fastidioso por tanto tiempo sin cumplir el objetivo, aunque cuando una persona de la organización le informó que restaban menos de diez minutos para el arribo de la primera moto todo se modificó. Le bajó el banderazo a Ciryl Despres y posteriormente a Marc Coma, aunque cuando fue a saludarlos al sector donde firman la planilla de llegada, ambos pilotos se retiraron rápidamente y el encuentro quedó frustrado. Después de algunos minutos más en el puente, Gioja decidió emprender la retirada en el helicóptero de la provincia. Su próximo destino fue una carpa vip instalada durante el recorrido donde, por ejemplo, se saludó con Marcos Patronelli, hasta el momento el único argentino ganador del Dakar, quien en esta edición ya abandonó por un vuelco. Por último, Gioja se dio tiempo para la chance que San Juan tenga en el 2012 otra vez la carrera: "Vamos a hacer todo lo posible para que así sea. En estos días tengo entendido que se definirá esa chance y esperemos poder conseguirlo", cerró el gobernador.