Molesto. Pep Guardiola desmintió cualquier contacto con la AFA y no se guardó nada.

Josep Guardiola puso cara de pocos amigos. Entrelazó sus manos mientras escuchaba la pregunta. Esperó agazapado. Y se tiró encima con su respuesta. Tenía ganas de decir lo suyo. Y arremetió con todo. El entrenador español del Manchester City negó haber sido contactado por la AFA para dirigir a la selección argentina y criticó duramente al presidente Claudio Tapia por difundir que el catalán resultaba inaccesible debido a los presuntos números elevados de su contrato.

"Nadie se comunicó conmigo ni con mi entorno. Estoy dolido con Tapia por haber hablado de mi salario. El presidente de AFA no sabe nada de mi situación. En todo caso el entrenador debe ser argentino y hay muy buenos entrenadores argentinos", sentenció Pep en rueda de prensa.

En la semana, Chiqui Tapia había revelado en una entrevista con TyC Sports que se comunicaron con Guardiola y averiguaron detalles de su contrato con el objetivo de tentarlo para que sea el reemplazante de Jorge Sampaoli en el banco argentino.

"Averiguamos, sí, pero es muy difícil... Billetera gorda", dijo entre risas el titular de la AFA.

Y siguió en la misma línea. "Había una imposibilidad muy grande. Tenés que tener un buen respaldo, es mucho, es mucho. Tenemos que hipotecar todo, y no sé si juntamos... Hicimos una consulta, pero era muy difícil, muchísimo. Hay técnicos que por ahí ganaban muchísimo más que Sampaoli en la Mayor. Pero nunca pensamos que fuera tanto, quedó ahí".

El intento de contratar a Guardiola -ese llamado que desde AFA aseguraron haber hecho- ya había sido consignado por Clarín semanas atrás. Hasta que una inesperada granada voló este viernes desde Manchester donde Guardiola brindó una conferencia de prensa y fue consultado por el tema. El DT que dirige al Kun Agüero fue terminante. No tanto por su esperable negativa al banco argentino sino más bien por su enojo al haber quedado envuelto en un enredo indeseado.

"Estoy bastante decepcionado con lo que dijeron en Argentina, diciendo que era imposible que me contrataran por mi salario. Tengo contrato y me tengo que quedar acá, pero no fue correcto decir que la razón para no dirigir a la Selección argentina era mi salario. No está bueno que me ponga en un lugar incómodo porque no sé qué podría pasar en un futuro", apuntó Pep, enojado.