Un poco más de 100 kilómetros recorrió Carlos Roberto Escudero en 1969 cuando se coronó Campeón Argentino de Ruta. Solo físicamente pero un sinfín de pensamientos lo acompañaron durante 2 horas 44 minutos y 59 segundos, momento en el que cruzó la meta y se coronó en un torneo nacional de ciclismo.

Hace 50 años, Carlos Escudero anotaba su nombre en la historia del ciclismo provincial, ya que se convirtió en el primer sanjuanino en ganar un Campeonato Argentino rutero, que en aquel entonces se llama "de resistencia".

El ídolo de muchos pedaleros falleció el 15 de julio 2015 pero vive en el recuerdo del ambiente deportivo por la hazaña que logró en General Roca, Río Negro.

Carlos era un deportista aguerrido, que se concentraba en cada competencia y que se había preparado para obtener un podio en dicho campeonato, según lo definieron sus oponentes. La carrera se largó a las 9 de la mañana y cada 60 segundos los ciclistas iniciaban sus esfuerzos.

El pedalero que creció en la Villa Flora tuvo que recorrer 110 kilómetros y no fue hasta los 76 kilómetros que marcó diferencia. Cuando le consultaban sobre qué pensaba durante tanto tiempo sólo, con un sonrisa y esa voz calma que lo caracterizaba, respondía "quería alcanzar al de adelante".

Ante un total de 49 pedaleros, Carlos Roberto se impuso con autoridad: cruzó la línea marcando 2 horas 44 minutos y 59 segundos, aventajó casi un minuto al segundo y dos al tercero. Alberto Sureda de La Plata y Jorge Fulgenci de 25 de Mayo completaron el podio.

En General Roca, el seleccionado sanjuanino festejaba; la 56ta edición del Campeonato Argentino de Ruta se lo adueñó el legendario Carlos Escudero. Pero la alegría no quedó sólo en obtener la copa, en San Juan lo esperaba un gran recibimiento.

Un martes por la tarde, la comitiva que había participado en Río Negro pisó suelo cuyano. Un camión que llevaba el nombre del flamante campeón cargó a todos y una importante caravana de autos los acompañó desde Casuarinas hasta la Esquina Colorada.


 

La gente salía a la vera de la ruta como si estuviese pasando verdaderamente la competencia y se sumaba a la alegría que traían los pedaleros sanjuaninos. "¡Dale Campeón! ¡Dale Campeón!", se escuchaba incansablemente.

Era una fiesta. Carlos fue agasajo como se lo merecía y los sanjuaninos no querían perderse la oportunidad de saludar al campeón.

Y fue hasta que se abrazó con su familia, que Carlos no aflojó. La emoción le brotó por cada poro y recordó cada kilómetro que completó con su bicicleta para lograr subir a lo más alto del podio. Ese triunfo que completó en menos de tres horas pero perdudará en el recuerdo de cada amante del ciclismo.

Una de las últimas fotos que le tomaron a Carlos Escudero, en el circuito rutero que lleva su nombre.