Un final para el infarto. Sufrido por donde se lo mire. Vélez estuvo a un gol de ir a los penales y no ahogar el sueño de clasificar a los cuartos de final de la Copa Libertadores. El Fortín hizo todo lo posible, todo lo que tuvo a su alcance, pero no contó con suerte y el arquero de Chivas, Liborio Sánchez, sacó lo que le tiraron. Mala puntería, bronca, muchas sensaciones quedaron en Liniers de que se podía, pero el 2-0 no fue suficiente ante las Chivas, que había ganado 3-0 en la ida. Ahora el equipo mexicano enfrentará a Libertad u Once Caldas en la próxima instancia.
Vélez pegó temprano, en la madrugada del partido comenzó a ilusionarse. Silva de cabeza hacía posible la remontada, 1-0. Ganaba el Fortín, pero la desesperación lo llevó por mal camino. Eso favoreció a Chivas, que bien ordenado atrás y con tranquilidad esperó de contra. Con esa táctica tuvo algunas oportunidades para igualar, pero Barovero las impidió.
Con el correr del tiempo Vélez creció, con su orgullo como bandera metió en un arco a las Chivas, que no podía salir. Así comenzaron aparecer los generadores de fútbol, Moralez, Zapata y Somoza, y arriba la dupla Silva-López hacía desmanes, pero faltaba definición, puntería, aunque también hubo mérito del arquero Sánchez, que sacó dos pelotas de gol.
En el segundo tiempo Vélez con menos volumen de juego, pero con actitud y un corazón a prueba debalas, siguió manejando el partido, incluso Moralez sacó un remate desde lejos, que besó el palo. Las Chivas se refugió del todo, los defensores se cansaron de rechazar centros, pero la pregunta era ¿hasta cuando iba a aguantar?. Y Vélez se arriesgó al todo o nada. Quedaba mal parado en las contras y sino fuera por Barovero, que le tapó una pelota de gol a Dávila, la historia hubiera terminado mucho antes. Al no poder entrar con pelota dominada, Vélez intentó desde lejos con un remate de Alvarez, que Sánchez sacó de manera estupenda. En la jugada siguiente otra vez Alvarez, sólo, la tiró afuera.
Todo era de Vélez, menos el gol, López volvió a fallar y cabeceó al palo. Pero tanto va el cántaro a la fuente que llegó el gol, que Zárate a lo guapo y de cabeza anotó en el minuto 43. Un gol le faltaba a Vélez para ir a penales, pero a pesar que lo intentó con todo, esa hazaña nunca llegó.
