La edición 2010 del Rally Dakar Argentina-Chile, que pasará por San Juan el 13 y 14 de enero, no será idéntica a la de este año cuando la prueba más peligrosa y famosa del planeta llegó por primera vez a Sudamérica. La organización de la prueba que se originó en 1979 pensó en distintos cambios, que seguramente en nada tocarán la adrenalina y pasión de los fanáticos. Algunas variantes son por obligación y otras debido a los intereses económicos en la carrera que este 2009 generó un impacto económico total de 390 millones de dólares. A continuación, un repaso por los tres focos más importantes de las modificaciones.
Recorrido
Acaso éste sea uno de los aspectos más diferentes al de la edición 2009, incluido el paso por primera vez por San Juan para la terminar la etapa 11ra. y comenzar la siguiente. No es sólo una modificación cuantitativa de los tramos que ahora tendrá cada país: Argentina pasará de contar con nueve a siete etapas y así Chile alcanzará el objetivo de igualarlo con la misma cantidad. ¿Por qué la variante? La inversión realizada este año por el país vecino para tener nuevamente al Dakar es de siete millones de dólares, uno más que la Argentina. La condición para semejante desembolso es que ambos países tuvieran igualdad de parciales. Además, desde la empresa organizadora del Dakar, la Amaury Sport Organization (ASO), se reconoció que pretendían más imágenes de las dunas Atacama, algo que causó un gran impacto en los espectadores. Todo con la condición que, como siempre ocurrió, la carrera tuviera una extensión de quince días. Claro que lo que Chile no logró fue torcerle el brazo a Buenos Aires, que nuevamente será la partida y llegada de todo el circo.
Entrando en el trazado fino de la prueba, esta vez la ASO decidió hacer un recorrido en rulo. Es decir, partir de Buenos Aires hacia el norte y no al sur como la edición reciente. Por eso es que Argentina perdió un par de etapas como las del sur patagónico, con Chubut y Neuquén como grandes derrotados esta vez pese al furor que mostró el público al paso de la caravana.
Reglamento
Para darle una mayor igualdad a todos los equipos que participan del Dakar es que la ASO decidió ciertos cambios en esta arista. Dentro de las motos ratificó que todas debieran tener como límite de potencia los 450 cm3 por lo que aquellas que tuvieran una mayor cilindrada deberán utilizar una "brida” que les reduce justamente este aspecto. La decisión de la organización motivó que la empresa "KTM”, ganadora con el español Marc Coma del 2009, se bajara de la prueba. La moto con que Coma se coronó era una de 690 cm3. "KTM tiene problemas más allá del Dakar, esto es una excusa”, se limitó a responder el jefe de la prueba el francés Etienne Lavigne, sobre la deserción de la marca austríaca.
Otro cambio importante tiene que ver con los autos nafteros. Debido a la gran superioridad de los que funcionan con turbo diesel es que se decidió que los primeros puedan aumentar el tamaño de la "brida”, pasando de 32mm. a 34mm.
Mientras que apuntando a una mayor seguridad de las motos y los cuatriciclos, significativamente menos potentes que los vehículos de cuatro ruedas, es que en la segunda y tercera etapa (Colón-Córdoba y Córdoba-La Rioja) se definió que por primera vez tengan caminos distintos. También se acortaron las distancias para motos y cuatriciclos en ambas etapas.
Participación
La organización se encontró este año con el grave problema de la merma de inscriptos. Pese a que se decidió postergar el cierre para anotarse de fines de julio al primero de noviembre la cifra exacta fue de 373. Es decir, mucho menos que los 580 del 2009. Aunque la gran modificación es que la presencia nacional será mucho mayor: de los 13 de este año a los 46 que formarán parte de la siguiente edición, entre ellos los sanjuaninos Lino y Juan Pablo Sisterna dentro de los autos. Los motivos de la reducción pasan principalmente por la crisis económica mundial que por ejemplo provocó la ausencia del equipo oficial Mitsubishi, el histórico ganador del Dakar.
Parte del contrapunto con este año tiene que ver con que en el 2008 la competencia se canceló y así los corredores decidieron "volver” de forma masiva el 2009. Además y como forma para ayudarlos económicamente y alejarlos de los miedos de atentados terroristas, la ASO bonificó la inscripción para este año. Los presupuestos de cada equipo son monstruosos más si se tiene en cuenta que, por ejemplo, la inscripción de un auto cuesta 3.500 euros, un mecánico 9.700 y un piloto 12.000.