Cualquiera que entrara anoche al estadio Del Centenario y viera a Alianza y San Martín podría llegar a decir que era el equipo sanjuanino el último y su par mendocino el primero de la zona E. Pero los números eran diametralmente opuestos, más allá de lo que se vio durante los 90′ que marcó el inicio para ambos en el año. Es que el Lechuzo tuvo una noche negra y cayó sin atenuantes 2-0 ante el Chacarero, que hacia cinco fechas que no ganaba. Lo bueno pasó por lo extradeportivo ya que esta vez en la interna de la barra sanjuanina no se produjeron incidentes, algo destacable luego que en la semana una persona fue herida de bala por esta disputa.

Entró dormido el equipo de Vázquez. Los de Magistretti fueron todo lo contrario, basando su juego en una presión asfixiante en tres cuarto de campo. Con ese argumento le quitó el balón al local. Sin Burgo con la pelota en sus pies, la generación de juego de Alianza resultó nula. Encima, en la defensa dejaron muchos espacios tanto Ceballos, como el debutante Berza. Con el paso de los minutos, empezó a generar riesgo el Chacarero. Primero fue a los 18′ con un derechazo del mejor de esta parte, Alaniz, que asustó bastante a Coronel. Fue un aviso porque siete minutos después el propio volante de derecha reventó el travesaño en un tiro libre. Pereira respondió al toque con una jugada personal por derecha, pero su remate salió desviado. Era dominio mendocino en el juego y también en el marcador pues a los 33′ tras una buena jugada colectiva, Reggi facturó el primero con un zurdazo y puso fin a una sequía de 420 minutos sin anotar. El 0-1 complicaba aún más la situación en un estadio Del Centenario que ya tenía a los hinchas lechuzos enfurecidos con sus jugadores y cuerpo técnico. Ni qué hablar con el segundo, cuando ya se jugaba tiempo adicionado. Guevara metió un zurdazo en el primer palo que se le escurrió a Coronel. Insultos para todos los gustos fue el sonido ambiente para los futbolista de Alianza y también para su conductor.

No cambió mucho la historia en la parte final, incluso con la expulsión de Fernández en los mendocinos. Alianza tuvo los tres cambios posibles antes del primer cuarto de hora, pero igual careció de una idea clara. Fueron arrestos individuales por parte de Uranga o Paratore, pero no más que eso. San Martín se refugió en su campo y salió de contra. Casi marca el tercero Guevara pero su remate terminó alto. Para el local realmente poco de riesgo. Sólo un cabezazo de Uranga en media hora llegó a inquietar en algo a Batistella. El final de la noche fue con un Alianza impotente buscando un descuento que nunca llegó.