Considerado por muchos como el mejor basuqetbolista de todos los tiempos, Michael Jordan celebró ayer sus cincuenta años con una fiesta para 300 invitados que se realizó en el Museo de Bellas Artes de Houston (100.000 dólares le costó el alquiler), la ciudad texana donde se realiza este fin de semana el Juego de las Estrellas.

LeBron James y Kobe Bryant, que al cierre de la edición jugaban el partido del Juego de las Estrellas en esa ciudad, fueron algunos de los invitados de Air Jordan.