Arsenal venció anoche por 3-2 a Boca en un partido que se hizo vibrante por los diferentes matices que presentó. El resultado le permite al vencedor seguir en la lucha por el título del Torneo Inicial y dejó a su adversario prácticamente descartado. El equipo de Gustavo Alfaro, que tuvo ventajas parciales de 2-0 y 3-1, fue claramente superior en el primer tiempo, con una mejor estructura, ideas más definidas y buenas respuestas individuales.

La primera oportunidad de gol le correspondió a Boca y fue a los 11’; un fuerte remate de Riquelme desde fuera del área que rechazó Campestrini. Tres minutos después, una torpe infracción de Rodríguez contra Caraglio permitió que Aguirre, con remate de zurda por afuera de la barrera, al palo derecho de Trípodi, colocara el 1-0. Desde entonces fue casi todo de Arsenal, que fue creciendo, recuperó la pelota con facilidad y la hizo correr con fluidez, en tanto Boca no encontraba fórmulas para acercarse al arco rival. A los 20’, Furch cabeceó sin marca un tiro libre ejecutado por Aguirre desde la derecha y Trípodi, en una intervención milagrosa, desvió al córner. Sobre los 26, un rebote le quedó en el área a Caraglio, quien definió de gran manera por encima de Trípodi y colocó el 2-0. Diez minutos más tarde, después de un mal rechazo, Furch conectó de zurda en el área y generó otra intervención comprometida de Trípodi. De inmediato, un remate de Iván Marcone se desvió en Furch y la pelota salió al lado del palo izquierdo; y a los 44, una acción individual de Pérez terminó con derechazo muy alto. Boca recién pudo armar una buena maniobra de ataque a los 45, con un pase de Cristian Erbes para la llegada de Matías Caruzzo por derecha, centro atrás y el remate de Claudio Riaño en el travesaño. En el complemento, Boca salió a atacar y encontró el descuento a través de un córner de Jesús Méndez que cabeceo muy bien Caruzzo. Muy poco después, a los 9, Carrera robó una pelota, avanzó con Boca desarmado, la pelota derivó en Caraglio, quien abrió hacia la izquierda, y el centro de Aguirre produjo un cabezazo impecable del propio Carrera para establecer el 3-1. Acto seguido, Arsenal se replegó demasiado y además bajó notablemente el nivel de los centrales. A los 31’, ante un pelotazo frontal de Riquelme, los dos defensores se complicaron frente a Riaño, a quien le quedó la pelota para conectarla de media vuelta y con zurda, sellando el 3-2. En los últimos minutos, Arsenal sólo llegó una vez a través de Emilio Zelaya, quien desde fuera del área y por arriba de Trípodi estuvo a tiro del cuarto. Boca, con mucho empuje, pero escasa coherencia en sus movimientos, pudo haber empatado con un remate de Paredes que controló Campestrini en dos tiempos, a los 35; una media vuelta de Gigliotti con zurda, a los 39 (la pelota rebotó en el palo izquierdo y recorrió la línea de meta) y, ya en el tiempo agregado, con otro disparo de Paredes, apenas desviado.