Bere había ido al Monumental con la ilusión de festejar su cumpleaños con, al menos, un gol y un triunfo de River. El invicto de 31 partidos invitaba a soñar, pero quiso el destino que aquella jornada, el Millonario cayera 1-0 ante Estudiantes de La Plata por el torneo local. Al regresar a su casa, la joven ya no soportó el desencanto.