En la asamblea de noviembre del año pasado se determinó en la Federación Ciclista Argentina de Pista y Ruta (FACPYR) que los ciclistas que defendiesen los colores de una federación deberían tener, como mínimo, dos años de residencia en la provincia donde esté situada. Por este motivo, ciclistas como Laureano Rosas (tiene un año de residencia, según su documento en la provincia, aunque lleve tres desarrollando su labor profesional en San Juan) no pueden correr para la Federación Sanjuanina.
Como muchos corredores quedarían excluidos del certamen se decidió que corriesen para sus federaciones de origen o con una camiseta neutra. Ayer se dio el caso de la sanjuanina Graciela Zárate, que corrió para la Federación de Neuquén, pero al podio debió subir con una camiseta de San Juan y generó una controversia.
En el caso de Laureano Rosas, José Díaz, secretario general del SEP, conversó largo y tendido con Gabriel Curuchet, explicándole que hay pruebas fehacientes de que el corredor habita en San Juan desde hace tres años. “Nos abrió una puerta, diciéndonos que lo charlará con sus pares de comisión”, dijo el gremialista que tiene previsto reunirse esta noche con el dirigente.