Los hermanos Hermes y Fabio García tardarán un tiempo en digerir el mal trago que vivieron ayer. Luego de un martes lleno de emociones se preparaban para partir en la cuarta etapa, pero la organización les informó que estaban descalificados por no haber pasado por dos puntos de control la segunda etapa y resumían su sensación en una palabra: impotencia.
Este inesperado final tuvo su origen en la segunda etapa. “Largamos la etapa del lunes a una hora muy tarde, por lo que llegamos a las dunas de Nihuil después de las 18. A las dos de la mañana decidimos parar porque podíamos volcar y esperamos hasta que comenzó a aclarar para seguir. Marchábamos con otro camión del equipo, conducido por el español Alberto herrero que tiene mucha experiencia, quien sufrió un vuelco e intentamos ayudarlo”, relató Hermes. Fabio continuó con la cronología: “Llamamos al equipo y nos dijeron que dejáramos el recorrido y viniéramos al vivac de San Rafael para no quedar afuera de la tercer etapa”.
Arribaron al vivac a las 10,20 y dijeron que le dieron orden de salida a las 10,30. Hicieron una gran carrera, superando a una treintena de camiones, pero en San Juan se enteraron ayer de lo que no esperaban. “Nos dijeron que como no habíamos completado los dos wet points finales de la etapa anterior, quedábamos afuera. Sentimos una gran impotencia. Lo que no entendemos es que si son tan rigurosos, ¿por qué nos dejaron partir entonces el martes?”, se pregunta Hermes. La respuesta que recibieron fue que la orden llegó directamente de los controladores en Francia.
la frustración es mayor porque los hermanos García conocen muy bien el tramo que iba a correrse ayer y además iban a recibir el apoyo del público sanjuanino. “Hicimos tantos sacrificios, fue un proyecto de dos años”, se lamentaron.