Equipados. Fueron los primeros en llegar y últimos en irse. Tienen todo el equipamiento: matafuegos, lingas, polvo desengrasante, entre otros.

A pesar de que no se ven, su trabajo resulta fundamental para que las motos puedan girar en el Villicum. La labor que realizan los banderilleros es clave. Federico Cabello, uno de los representantes de ASER (Asociación Sanjuanina de Enduro y Rescate), el Superbike requiere del servicio de más de 200 personas distribuidas en la pista: son en total 135 entre ayudantes y banderilleros, además de 75 jefes de puestos que son quienes están intercomunicados con el Race Control por cualquier circunstancia de carrera. "Ellos son el pilar para que la carrera pueda realizarse", comentó Cabello. El grupo se reunió cada día del Superbike a las 5,30 en el centro, luego de ser trasladados hasta Albardón y ser distribuidos a lo largo de la pista, a las 8 debieron tener la pista lista para la primera revisión de la FIM.