San Juan, 30 de mayo.- Todos los sectores del Estadio del Bicentenario estuvieron cubiertos esta noche con los colores azul y oro, producto de que esos son los colores de Boca y Rosario Central, quienes se enfrentaron por cuartos de final de la Copa Argentina.
Los hinchas xeneizes fueron mayoría y ocuparon la popular Norte y las plateas Oeste y Este. Alentaron a su equipo en todo momento y también se acordaron de River, su eterno rival. Se mostraron nerviosos en el momento de los penales y festejaron a más no poder cuando los dirigidos por Julio César Falcioni clasificaron a semifinales por penales.
Por su parte, los hinchas canallas, que fueron unos 400 y ocuparon la cabecera Sur, se ilusionaron con la clasificación porque su equipo ganaba el partido, se amargaron cuando Sosa le atajó el penal a Toledo y se fueron tristes con la derrota, pensando en que el único objetivo que queda es ascender a Primera.

