Cualquier persona podría pensar que la localía fue un factor importante para que la provincia lograra la tercera ubicación en el medallero de los Juegos Binacionales. Sin embargo, si uno analiza el potencial de los deportistas locales se dará cuenta de que no es casualidad que hayan quedado por primera vez en la historia terceros en el medallero general.

Hubo que esperar hasta la 14ta edición para que San Juan dejara atrás a cinco delegaciones de las ocho que participan. La natación y el ciclismo fueron los principales motores de la cosecha por la cantidad de preseas que reparten. Pero el tenis (en ambas ramas) y el fútbol resultaron los logros más destacados ya que se colgaron por primera vez el oro y confirmaron las buenas actuaciones de los últimos años. El vóley, como es costumbre, también hizo un excelente papel. Los varones y las damas debían defender el primer puesto conseguido en Maule 2009. Y si bien sólo los chicos repitieron ese resultado, las chicas lograron la medalla de bronce.

Otra disciplina que cosechó su mejor lugar en la historia de los Binacionales fue el básquetbol: los chicos perdieron la final ante Córdoba, siempre el máximo candidato. En tanto que el atletismo, una disciplina con poco apoyo en general, festejó su primera medalla desde que se crearon los Juegos. Finalmente, el hándbol y el tenis de mesa demostraron que tienen un buen futuro. Ambas no estuvieron a la altura de las potencias pero la proyección que muestran es bastante interesante.

Los objetivos están más que superados en materia Binacionales. Pero lo mejor de los chicos, está por venir.